El Cuarto de los Diez Mandamientos de la Ley de Dios dice: “Honrarás a tu padre y a tu madre”. Y yo añado lo siguiente: “Honrarás también a los padres y las madres de los demás seres humanos; incluyendo, por supuesto al Padre y la madre de Jesucristo”. Porque resulta que, en muchas partes del mundo, he oído a muchos deslenguados que no los honran ni los respetan.
Ya no solamente como cristianos y cristianas debemos de tener la lengua callada cuando vamos a hacer tal acto de ignorancia, de mala educación y de falta de personalidad como Dios manda. No sólo como cristianos sino también como simples seres humanos. Porque si algo tenemos que decir a alguien no es de hombres insultar al padre o la madre de ese alguien y sí lo es tratar los asuntos cara a cara sin mezclarlos para nada en el tema a tratar.
Yo creo que a esa clase de personas que no saben respetar a los padres y las madres de los demás, sería necesario frotarles sus lenguas viperinas con aceite de hígado de bacalao y lijárselas con papel de estraza y un poco de asperón para ver si se les limpia la conciencia antes de meterse con los padres y las madres que no tienen culpa ninguna. Así, cuando la lengua se les quede áspera, ácida y hasta ardiente, dichos machistas quizás lleguen a darse cuenta de que el camino del machismo sólo conduce a la patanería. Habría que escribir muchas páginas enteras dedicadas a esta clase de enrgúmenos para ver si de una vez por todas dejan de ser burros de cuatro patas y se convierten en humanos de dos brazos y dos piernas.
Hola Diesel,
tu reflexi’on, aunque tiene un poco de humor negro (sería necesario frotarles sus lenguas viperinas con aceite de hígado de bacalao y lijárselas con papel de estraza y un poco de asperón…), invita a gritarlo a los cuatro vientos!!
estoy segura que en este mundo hay muchos que ignoran la importancia de respetar y m’as a’un! los beneficios que el respeto tiene para llevar una vida mejor.
Abrazos 🙂
Hola Laura. Otra vez tengo el placer de encontrarte por aquí. Rssulta que, lamentablemente, hay algunos seres a los que no sé si llamarles humanos (sobre todo en el ámbito de los varones) que parecen olvidar este Mandamiento y en seguida abren sus bocazas para insultar a quienes no tienen ningún derecho a insultar. Algunos hasta insultan al Padre de Jesucristo sin saber, los muy ignorantes, que para Dios sólo son minúsculas motas de polvo que puede borrar del mundo de los vivos con un solo soplido. Esos seres, a los que no sé si llamarlos humanos, se las dan de muy vivos pero cuando llega La Hora de la Verdad se hacen caca por los pantalones. Lamentablemente da asco escucharles ¿hablar?. Hasta los animales son mucho más respetuosos que ellos (y alguna que otra ella que se las da de ser como ellos). Mala educación, incultura, ignorancia y animalidad juntos. Ver para creer. Pero lamentablmente hay personas así. Y luego vienen a pedir perdón. Que les perdone Dios, cosa que lo dudo, porque se toman a Dios como un ser al cual insultar constantemente. Pasan muchas cosas en la vida que no podemos comprender cuando no queremos comprender. Es la hipocresía de quienes cometen esas fechorías y luego dicen que no saben por qué les suceden tantas desgracias juntas. Bueno, Laura, que además de personas que insultan sin miramiento alguno a quienes no tienen la culpa de sus males además son hipócritas cuando tienen que soportar la Ira de Dios.
Hola Diesel,
esos seres a los cuales te refieres son de carne y hueso pero puedo decir y seguir afirmando que ignoran quienes son y casi seguro ignoran para que estan en este planeta maravilloso. Sigamos pidiendo por su recuperacion 🙂
saludos y abrazos sinceros
Totalmente de acuerdo contigo Laura. He conocido, lamentablemente, a muchos que no saben ni quiénes son en realidad ni para qué han venido a este mundo. En verdad, si no se sabe para qué hemos nacido sería mejor no haber tenido la oportunidad de nacer; pero son tan ignorantes y, sobre todo, tan desagradecidos, que en vez de dar Gracias a Dios por haber venido a la vida se pasan siempre la vida atacando a Dios de las maneras más sucias y vergonzosas que te puedes imaginar. En realidad ser humano consiste en saber para qué somos seres humanos… pero tratar de estos temas con algunos es más estéril que intentar hacer que un burro gane el Premio Epson de carreras de caballos. Valga el ejemplo para hacerte saber lo que quiero explicar.
me encant’o tu ejemplo, m’as claro que nada. As’i es amigo Diesel solo nos resta ser tolerantes y seguir del lado de la esperanza.
Te mando un abrazo
Totalmente de acuerdo contigo en ser tolerantes ante el máximo posible de ser tolerantes pero… como hacen ya por algún lugar que otro… hay temas que deben ser “Tolerancia Cero”. Porque si hundimos la sociedad tolerando lo intolerable estamos cometiendo la absurda tarea de ayudar a destruir a la Humanidad entera. Tolerantes hasta el máximo de lo tolerante pero en pasando ese límite… Tolerancia Cero… UN AMISTOSO ABRAZO TAMBIÉN PARA TI.
La tolerancia es infinita y es infinita porque se comunica directamente con el corazon. En lo personal aplico la tolerancia cero para evitar cualquier desman.
Un saludo a la distacia amigo Diesel