Horas blancas

Horas blancas de la vida
entre los días del sueño.
Una porción de aventura.
Un soneto.
Sopla el viento
mientras la luna escucha
la narración de un cuento.

Tres puntos suspensivos del alma
en el profundo sentimiento
de las olas que, en calma,
son el concierto
de las canciones más grendes
del pensamiento.

Horas blancas…
horas blancas de un momento.

4 comentarios sobre “Horas blancas”

  1. Muchas gracias. Me dáis aliento. No porque os parezca bueno el poema sino porque lo decís de corazón. Ese es el verdadero aliento que necesitamos los poetas y las poetisas y nos los grandes premios comerciales del “merchandising”.

Deja una respuesta