Me envuelvo en olvidos para no olvidarte,
me lleno de vida para no vivirla,
me escondo en las sombras de las sombras grises
y en las primaveras de dias felices.

Y floto en los mares donde todo es frío
y canto tu canto de ilusiones nuevas,
dormito en la orilla que marcó tu cuerpo,
en la limpia arena donde todo es cierto.

Camino en el bosque donde no te encuentro,
paseando mis sueños, que murieron nuevos,
hay bruma en mis ojos que yo no merezco
y que tú no miras ni debes saberlo.

Y, cae la nieve envuelta en silencios,
en la húmeda noche que cubre la hierba,
no serás olvido, no serás olvido,
no serás tristeza ni serás martirio.

La dulce amargura, mi triste alegría,
enmudece mi alma atada a un cilicio,
la franca ironía, cordura insensata,
sólo son heridas que duelen, no matan.

Me envuelvo en olvidos para olvidarte,
y duermo despierto envuelto en silencios,
un río reclama su lecho escondido
mas tú no lo escuchas o no lo has sentido.

Y así paso el tiempo, de olvido en olvido,
pero no me quejo…sólo es dolor mío.-