Memoria de los dias

Mi memoria se fragiliza,
como el vidrio verde o como cualquier estrella.
Me das el silencio, la moneda justa
para pagar el precio de la duda.
El sortilegio evoca la razón temerosa del por qué.
Risa falsa,; entre bastidores se coloca la máscara de mimo
y miente, se miente, porque se ausenta.
Espiral. Así, tergiversados los versos
para parecer menos cadencia musical
que ritmo solitaria.

La ola muere en la palma de la mano
y la marea arrastra la barca hacia el ocaso.
Un miedo turbador se apodera
de la madera del barco
que zozobra en la marea.
¡Terquedad, incansable apego a un hecho
monstruoso y palpitante!
Miedo y temblor…
El verso muere.

Un comentario sobre “Memoria de los dias”

  1. Como siempre, amigo grekosay, llenas de profunda materia el hueco de las razones abiertas. !Qué bien!. La memoria de los días se nos fragmenta en bifurcaciones llenas de turbadores zozobras.

Deja una respuesta