Mi prima Marta

Marta, de niña, era un angelito vestido con ropas del siglo XX. Con una cara muy dulce, unos ojos grandes e inocentes, una sonrisa que nunca se borraba de sus labios. Venía a pasar a mi casa algunos fines de semana y era encantador tenerla con nosotros.

Hoy día, Marta es esposa y madre de dos hijos, de 16 y 20 años respectivamente. Sigue teniendo una cara muy dulce, una sonrisa que traspasa. Ahora parece un ángel vestido con ropas del siglo XXI.

Un comentario sobre “Mi prima Marta”

Deja una respuesta