Necesitamos mitos. No podemos dejar que sólo el lenguaje tecnológico se apropie de la existencia. Leyendo la explicación de la formación de una galaxia, descubro que precisa de una gujero negro en su parte central, como hermano rector, ojo, columna vertebral de su totalidad. No es accesible el contemplar estas increibles manifestaciones de un hermoso universo infinito. ¿Qué reacción tenemos cuando surgen los símbolos humanos? Una costaleción se convierte en un elemento del Zodíaco, pero se nos han agotado las posibilidades. Los dioses, a pesar de estar imponiendo su ley, se esfuman, como termina esfumándose un agujero negro al evaporarse. ¿Por qué no reconocemos que somos humanos? ¿Por qué creemos que la desproporción es tan grande entre la filosofía y la física de partículas? ¿Por qué interesa más una formación galaçctica que una formación del pensamiento del hombre del mediterráneo?
Nunca veré una galaxia de cerca. Tampoco me interesa. Pero…si escucho o leo una reflexión, algo natural en mí me lleva a responder, como si la natureleza humana resonara con el sonido de las esferas.