Recordando a Quevedo.

La sangre azul
al salir del baúl
tiñó de rojo
al rey Saúl,
llenádose de gozo
al beberse el Red Bull
ganado con tanto arrojo.

El pelo corto marrón
de su ayudante el barón
de punta tieso se puso
cuando sin meter la sanción
le dijo un amigo en desuso
se me parte el corazón
quedando como un iluso.

La vida de estos mastuerzos
la relato yo sin esfuerzo
pues son pequeñas pinturas
hechas sobre grandes lienzos
de esta informal escritura
puestas en los comienzos
de inconformista literatura.

Además yo he de decir
que tu debes de percibir
si lo que cuento te gusta
pues debes tu recibir
no de manera injusta
para asi poder sentir
si te alegra o te disgusta.

Si del modo que escribo
tu corazón yo cautivo
alegre me he de poner
pues no me parece ofensivo
escribir para imponer
un pensamiento furtivo
pues esto no es menester.

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