Razonemos amigos. En la mentalidad china antigua Busch hubiera sido un ser desgraciado por su arrogancia. Sus victorias serían fruto del acuerdo entre sicarios y su poder…un desafío a lo que Confucio llamó: la moral del gobernante.
Lejos de llegar al poder con una mentalidad de hombre justo, de líder se masas…soltó el aldabonazo de que Dios le había predestinado, y Dios cuando predestina…o te cuelga unas tablas que te tiran desde un cerro o acabas en la hoguera como una barbacoa.
He tenido el gusto de esuchar unas conferencias de Leonardo Bolf en el convento de Aranzazu de los padres Franciscanos, en Guipúzcoa. Un hombre con el pelo blanco, oliendo a tierra, hablando de la mística por la tierra Madre, de una religiosidad que no es fruto de los dioses que sacan chapas con los dientes, sino de la misma dificultad del camino. Hablo de la filosofía de la ecología, de la religosidad que ya los indios Síux, Apaches, etc…habían decubierto.

Si hubiera asistido a esta conferencia, el ínclito Busch hubiera necesitado mucha inspiración divina para alcanzar los mínimos de comprensión requeridos. Ya véis amigos….mientras las cosas divinas de la casa Blanca son juguetes en manos del destino…Dios ya no juega a los dados, le han acostumbrado a jugar con los tanques.
¡¡¡Urge un gran clamor universal en contra de quienes se han apoderedado del Padre/Madre y lo tienen a su merced!!! El grito se escucha en las selvas desecadas, en la América estéril, en las sabanas donde yacen los últimos hijos de las lluvias.
Seamos consecuentes…ya es hora de que la libertad incluya la libertad de DIOS, del dios de cada uno…liberémoslo o Roma hará de él un espectáculo de Circo.