No eligió las voces
Aprende a descifrarlas
Los muros que rodean
A veces logra
Tornarlos cristal
Malezas en jardines
No eligió su cuna
Elige merecerla
Todavía
La duermen nanas
Que vencen
Su gen insomne
Y un roble
Testigo mudo…
5 comentarios sobre “Sitios”
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Nadie elige su cuna, su destino, su vida.
Me haces pensar al leerte. Tu estilo es muy profundo. Un beso amiga.
Muy bien, Flama. Nadie elegimos nuestra cuna pero podemos elegir nuestra cama. No sé si me entiendes. En tu poema acabas diciendo “testigo mudo”… y quizás sea verdad que es testigo mudo la cama que elegimos libremente. La cuna importa mucho pero más importa saber elegir la cama donde duermes después de haber crecido lo suficiente como para abandonar la cama. Un abrazo cordial.
Wersemei, la generosa siempre eres tu, beso.
Estimado Diesel, muchas gracias, me has dejado pensando.Saludos.
Radiografía del parnacidio.
Las voces son siempre una comodidad heredada, aunque bien podemos decir que imaginamos merecerlas cuando llevamos un tiempo abusándolas.
Cristal es siempre el material de nuestras máscaras, malezas de sin-seres en el bosque que llamamos personalidad.
La cuna es siempre una balanza, el escaso equilibrio de la existencia, la causa de nuestra inopia.
“Más bello que morir es nunca haber existido”, según Eurípides creo, una vez testigo, ahora mudo como sólo mudos son los muertos.
Aún espero