Asoma la palabra y calla.
El corazón se ha vuelto frágil,
como caminar descalzo en la existencia.
Me olvié del olor de tus flores
y temblé al perderlas.
Tras el rastro claro de tu callar primero
prisionero de tu luz olvido y callo.
Lejos de abandonarme a la angustia
en ella habito, como adormecido insomne
de una noche.
Déjame que me abandone en el camino
y perpetúe el gesto amargo
de olvidarte.
La lucha cesa y es el arte de callar
quienescombaten contra la sombras de
la frágil memoria de los días.
Ríos de soledad y blancos marfileños.
Abrazándose a las sombras
quiebra tu palabra mi silencio
y en él habitamos como nube
y por él perecemos
sin saberlo.
2 comentarios sobre “TEMBLOR Y AUSENCIA”
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Y en la noche se acentúa
prefiero dormir y no darme cuenta.
Pero aquí se rompe el hielo
y esa gota de agua le da un aliento vital
a ese pétalo marchito.
Parece un poema de un poeta suicida. Me gusta. Abrazo
Gracias Juanjo:
El dolor no tiene límites, pero la elección voluntaria de la muerte…es una experiencia de las m´s trágicas que conozco. Gracias.