Una carta para reflexionar.

Viernes, 27 de agosto de 2010: estimados amigos y amigas de lecturas, Blas Pascal decía: “¿Quieres que hablen de ti?. No hables bien de ti mismo”. No se refería el gran Pascal a que no hables de ti con sinceridad para que los demás te conozcan como personade conocer a las mujeres, cometn el gave error de hablar demasiadas cosas de sí mismos. Ellos no saben que a las mujeres que vale la pena conocer sólo les interesa conocerte poco a poco, descubriendo tus virtudes y tus defectos porque no les gusta en absoluta ser conquistads por los charlatanes ególatras que las intentan epatar.

Las mujeres que valen la pena de verdad siempre que conquistan al hombre que quieren se dejan enamorar descubriendo, poco a poco, quién es ese joven al cual ya le han conquistado y las está enamorando lentamente, sin pausas pero sin prisas. Porque como decía Alfonso X el Sabio: “Los cántaros, cuanto más vacíos, más ruido hacen”; que quiere decir que aqellos hombres que hablan demasiado y a destiempo para aparentar ante ellas sólo son “mucho ruido pero pocas nueces”.

Os he dicho ya, muchas veces, que las mujeres emplean los ocho sentidos, ocho en total y no como muchos hombres que sólo emplean la vista, cosa que muchos hombres desconocen. Es por eso por lo que la mujer conquista primero al hombre que quiere y leugo se deja enamorar por él; porque el sentido que más emplean las mujeres que valen la pena (o sea las más guapas y a la vez las más interesantes) es sobre todo el sentido del oído. Escuchan todo, absolutametne todo, para conocer rápidamente si el hombre al que quieren es verdaderamente el hombre que desean conquistar. Cuando lo han localizado, nunca jamás lo olvidan y entonces ese hombre las enamora.

Tened en cuenta lo que señaló Pétil-Senn: “De una confidencia a una indiscrección no hay más distancia que la del oído a la boca”. Quizás muchos hombres no sepan que las mujeres guapas e interesantes de verdad usen tanto el sentido del oído a la hora esta de enamorarse. Y tened siempre en cuenta, amigos (porque es importantísimo pensar en ello en vez de emborracharse en las tabernas para querer olvidarlas siendo esto un imposible) lo que decía William Penn: “Cuanto menos sea el trago, más clara es la cabeza y más frío el corazón”. Ahora bien, si ya habéis conseguido enamorar a una de ellas y leed bien que digo sólo a una para que luego no os llaméis a engaño si véis alguna que otra cornamenta como adorno frontal, entonces poned el corazón todo lo más caliente que podáis cuando estéis con ella y solamente con ella.

Son buenas reflexiones para comenzar el dia. Las he escrito gracias al bar-cafetería Mediterráneo de Villarreal (Castellón de España) mientras estaba muy lado de una playa donde veo constantemente a mi Princesa.

8 comentarios sobre “Una carta para reflexionar.”

  1. Mi abuela materna: Hola nieto. Estoy deseando leer el texto ya debidamente corregido pero, la verdad sea dicha, entiendo perfectamente lo que has escrito en este. Hay algunos errores pero se deduce fácilmente lo que quieres decir. Haces bien en aclarar esto para que no existan equívocos y, repito, estoy deseando ver el texto corregido. Hay algo que tengo que añadir: ASÍ SOMOS LAS MUJERES QUE VALEN LA PENA SER CONOCIDAS Y AMADAS POR UN SOLO HOMBRE MIENTRAS NOSOTRAS AMAMOS A ESE UNICO HOMBRE QUE ES NUESTRO ÚNICO AMOR PARA SIEMPRE.

  2. Es una reflexion que vale la pena recordar, sin duda. Tal vez cuando yo este con deseos de establecer una relación seria, y asentarme con alguien, lo ponga en practica. Por ahora, solo quiero comer ligero, estar solo, disfrutar mi tiempo solo y desintoxicarme del plato anterior que lo sentí casi como el principal.
    Algún volveré con ganas de sentarme a la mesa, y quedarme con la especialidad de la casa. Pero por ahora, vino y ensalada esta bien. Saludos Diesel.

  3. Por eso a Alfonso X le llamaban Sabio quizás. También es cierto que tanto va el cántaro a la fuente que termina por romperse. Y eso también sucede con algunos que son “pillados” en “fuera de juego”. Un saludo cordial, Marian.

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