!Gracias, amigo Agirregabiria, por tu caliente exposición sobre los besos!.
A mí lo que me entusiasma en verdad es el beso revolucionario, ese beso humano profundo y libertario, explosivo que estalla a plena luz ante el flash de miles de fotógrafos que son los ojos de los viandantes. El beso desgarrador y restallante que derrumba las barreras de los reaccionarios intransigentes ante la más natural demostración del amor sano. Beso que levanta las airadas protestas de los seudomoralistas de la hipocresía ética, que hacen diatribas y se santiguan el cerebro, la lengua y los pectorales para condenarlo como herejía.
Archivo por días: 27 abril, 2005
Compañerismo, Amistad, Amor… (Pensamiento)
Truenos de amor
Amada Patria Distancia
Pedir sin medir
La formación del Gobierno Vasco es un paradigma del “por pedir que no quede”, o como dijo el poeta: ¡Qué mina inagotable es el pedir!
1º Leemos en la prensa de ayer en grandes titulares: “EHAK reclama a Ibarretxe los ediles que habría obtenido Batasuna en 2003”. ¡Inaudito, porque la “ilegalización aprobada por el PP-PSOE” ha beneficiado en sobre-representación a todas las formaciones, pero muy especialmente a… EHAK! Si algún partido debe devolver “toda” su delegación política es la propia EHAK, que ni existiría parlamentariamente si retornase sus nueve escaños a Batasuna.
Beso reimpreso
El beso es una forma romántica de diálogo, que se firma con los labios.
En 1950, Francoise Bornet y Jacques Carteaud se besaron ante el fotógrafo Robert Doisneau que se apostaba en la terraza de un ‘bistrot’ parisino. La imagen de un muchacho de pelo alborotado besando apasionadamente a una estilizada chica se convirtió en un símbolo internacional del amor cuando se difundieron millares de copias en forma de póster en la década de los años ochenta, siendo récord de ventas en 1992.
Las culturas del Vorem
La cultura, como fuente inagotable de vida o como esa tenue luz que vivifica el espíritu y engrandece el alma (tan rica y diversa como es ésta) le dota al ser humano, hombre o mujer de cualquier edad, de muchas formas de expresión y de múltiples caminos para manifestar sus vivencias que, todas juntas,forman un brillo perpetuo de la humanidad entera.
Pero la cultura, y en este sentido las pluriformes culturas que se expresan en el Vorem son un ejemplo, es también una expresión humana que desborda cualquier concepto de intolerancia y nos permite ser auténticos visionarios (diferentes cada uno de nosotros y nosotras) idealistas de lo lógico y lo ilógico, lo terrenal y lo divino, lo trascendente y lo intrascendente… toda esa amalgama de sentires profundos que llevamos dentro y que nos ubica en nuestra propia identidad. la cultura, vista de´ésta manera, es la certeza de nuestra sinceridad y la podemos expresar, fuera de los canales dirigidos por intereses ajenos, en palabras abiertas, con la frescura de nuestra propia sensibilidad.