“En la penuria de la soledad se fija la lejanía difusa del horizonte, esa tenue penumbra que dibuja una ilusión imaginaria donde se conjuran las tinieblas, se perciben los vacíos del tiempo, se adivinan las tormentas y las lluvias caen sobre el desierto de las almas errantes que vagan por las sombras del plenilunio tras el sueño de un ocaso hundido en su reflexión”.
Archivo por días: 4 junio, 2007
QUE VIENE EL LOBO (una historia verídica)
Corría la época de los 70 y yo era una de esas jipis de entonces, sólo que tan solo contaba con 13 años, estábamos en Galicia el Latas oriundo de Verín, el dudu, Susana y yo y nos dedicábamos a hacer abalorios, gargantillas, pendientes y pulseras.
Cerca del Grove llegamos una noche en autostop y acampamos en una zona llena de tiendas de campaña, pero nosotros nos considerábamos demasiado especiales para mezclarnos con los demás campistas, así que a la mañana siguiente, recogimos los bártulos y subimos al monte. En la cima hallamos un claro con un enorme tronco de árbol cortado, sitio ideal para acampar, no tardaríamos en tener compañía, esto no nos hizo la menor gracia y el Latas tuvo una idea;
¿Te acuerdas?
Playa 2007. Hoy ha llegado ya el calor a las costas mediterráneas así que Liliana y yo hemos decidido sumarnos a la visita a las playas del Mar Menor aceptando la invitación de Miriam y Jesús. En San Pedro del Pinatar hemos preparado una paella valenciana en base a arroz, distintas carnes y pescados, mariscos, caracoles y verduras. Después, bajo las sombrillas y tras habernos bañado largamente en el mar, nos ha llegado la hora de los recuerdos. De cuando aún éramos unos jovencillos quinceañeros que andábamos descubriendo el misterio suprahistórico de las relaciones entre chicos y chicas. Estábamos en aquellos entonces dispuestos a descubrir nuestras sinceridades en aquella incipiente localidad de Gandía…
Pensamientos y reflexiones… Absurdas.
Ni las lluvias de eterno fuego
Barriendo la sangre derramada.
Ni las hordas de seres monstruosos
Que atenazan mi alma.
Ni las armas, instrumentos de la guerra
Destructoras de uno mismo.
Ni la locura más grande
Puede parecerse a lo que siento.
Oscuridad, soledad, pena…
Sólo un rayo de pura energía me mantiene aún vivo,
El saber que no estoy tan sólo como ¿quisiera?…
De Cánticos a la Tierra
Salpica el ritmo que a la tierra mece,
que a la montaña acaricia,
que al hombre adormece.
Salpica el salto del danzante ébrio de luna.
Conjuro de la selva entre la sombra y la herida
de una hierba mora maldita en su textura.
Salpica el tiempo que se ahoga y grita.
Los santos mártires de aquellos árboles talados,
y da vueltas y vueltas la loca danza de los muertos.
Relato sobre la nostalgia.
Hoy me despierto y me miro en el espejo. El reflejo es borroso y dentro de el solo se encuentra tu cara… los últimos días solo pienso en ti a pesar de que crei haberte olvidado. Te borre de mi mente y de mi alma, y ahora el destino y el tiempo, la soledad y la desilusión, conspiran en contra nuestra. O mas bien, en contra mia. A kilómetros de distancia en este mismo instante, talvez también estes pensando en mi. Es mas dolorosa esa idea, alimenta mi deseo fugaz de correr bajo la luna y tocar tu puerta. La abres apresuradamente, el tiempo se detiene y mi corazon solo vuelve a latir al sentir tus labios, al mismo tiempo que susurras que estabas pensando también en mi. Entonces el pasado se olvida y el futuro es incierto, pero el presente esta aquí, entre tu y yo. Nos escapamos para estar solos y sentir…
MI AMIGA
¡No comprendo!
Locos sentimientos te abrazan durmiendo.
Quizás los anhelos del ayer, de los días viejos.
¡Ya no podía!
Pesaba demasiado recordar.
Olvidabas días fríos, soleados, lluviosos, secos… en fin, tus días
Por querer imaginar cosas que no eran, cosas que no son.
¡Piensa en ti!
Pregúntale al mañana qué vendrá.
Gira la ruleta, te dirá… Nada
Y escribirás lo que hace tiempo estaba escrito, mensajes sin descifrar.
LAURA PÉREZ LÁZARO.
Laureados horizontes de mismidad
La ley del silencio en la ladera más apartada de la cantera.
Una piedra chiquita, así…diminuta, casi integrada en la tierra
Dialogaba con una roca agreste…esculpida en la sabiduría de los elementos.
-¿Porqué murió el humano, madre?, creía que era el preferido de la creación.
-Cierto, chinita, pensaba que era el rey, con derecho a manipular
Contranatura todo a su paso.
-¿Se equivocaba? ¿No lo era?
-Desde Lugo que erraba, no puede ser el principal protagonista aquel que destruye y arrasa con todo lo realmente
Necesario para la existencia del planeta.
Miserere
Qué mundo aquél. Todo parecía mísero, la gente iba asustada, paseando el perro de la pobreza, sacándolo para que hiciera sus necesidades. O quizá era él, que experimentaba una visión deleznable en sus rostros ocráceos, perseguidos por la desfiguración teatral de la máscara terrorífica en la que se hallaban, camuflando el ridículo interno por una farsa exteriorizada.
-El mundo en su autenticidad, distinguido público.
Perdido ya en esa trágica sensación de reconocer la vulnerabilidad del espíritu, en una sociedad hostil, cada vez más integrada en el estigma frívolo e insólido del esteticismo. Pensó en los pensadores, en la absoluta austeridad de los monjes cartujanos. Entregados espiritualmente, atrapados en claustros amurallados y claustrofóbicos, en el anacoreta, el misántropo, el ermitaño.
Reflexión
“Soy mañana y oscuro es mi sol, sólo
el tiempo conoce la corta eternidad.
El camino va más allá de aquí y si tu
piel no acaricia mi yo, volveré vulnerable
a mi guarida y sin herida, grabaré
una vida concebida en el desierto de
levedad. Prenderé fuego al desván de las
cenizas de los ayeres y probaré que no existí”.