Todavía seguía considerando a Gimi como mi ídolo de la infancia… pero ya habían sucedido algunas cuestiones que iban alejándome de él. Uno de esos asuntos, no tan grave como matar inocentes gorriones pero que también contribuyó a mi total independencia de él y al desarrollo de mi propia autonomía es el que llamo “affaire” Somoza. ¿Fue justo o fue injusto lo que hicieron Jaime y Gimi con Somoza?. De acuerdo que Somoza era más bajito y no tan atractivo como Gimi pero… ¿por qué tenía que ser siempre el portero suplente de aquel equipo llamado Los Pinos en el cual, gracias a Dios, no llegué a debutar por sólo unos minutos?. Fueron, en realidad, minutos salvadores para mí.
Archivo por días: 21 septiembre, 2012
1.000 POEMAS
Estuve haciendo cuentas y puedo decir que casi-casi exactamente-exactamente quizás-quizás lleve escrito (con voz de niño cantor de premios de lotería) 377.666 caracteres, 69.544 palabras, 25.880 líneas (versos), 364 páginas.
¡Y esto sólo de poesía!
Huau, y pienso… ¡cuánta basura escrita!, cuanta burrada, cuanta inocencia, ignorancia, incoherencia, incertidumbre, innnn… etc
Huau, y pienso… (con expresión de viejo sabio) pero cuanta genialidad no hay ahí, eh…
Un observador de mundos
Un ácido observador de mundos
Un testigo presencial de la época que le tocó vivir
Un ácido testigo presencial de la época que le tocó vivir
Uno más entre todos, tal vez diferente, tal vez igual
Un ignorante, un sabio
Paciente, intolerante
Rey y basura
Nada, eterno
Enmarañado
Este enmarañado mundo que resurge de repente por capricho de mi suerte se burla a cada paso lento de mi rumbo, se oyen las campanas de un viejo campanario resurgir desde la plaza soleada y solitaria de un ayer inacabado. Se asoman mentes distorsionadas queriendo dar consejo a una vida de la que no saben nada y mientras tanto caen cenizas apagadas de un cielo descubierto que como ayer hoy vuelven a nacer en cada mañana incierta de mi porvenir. Quisera ser como un rallo atravesando esta loca y callada realidad. Y mis pies mientras camino, se unden bajo la tierra húmeda que la lluvia dejó sin saber que mi cuerpo yace desnudo y asustado pidiendo auxilio a los ángeles de la realidad. Vuelven las antiguas sombras, vuelven las noches de mil dudas, vuelven .
y aqui sentada , casi casi asustada, dibujo sobre la arena y con apenas un dedo mi nombre. Observo como lucha por mantenerse, como pide durar en los tiempos, pero rios cortos prefieren jugar con llevárselo hacia la mar. Mis cabellos se hacen blancos por la sal que el viento arrastra, mi rostro se hace frágil ante la verdad de lo inequívoco.
¿Me das un poco de Luna?
DESPERTAR
Aquella oscuridad absoluta me lamió los ojos. Mi campo visual es mínimo y aunque intento poner en práctica toda mi agudeza visual no soy capaz de adivinar un color o una forma. Lo que mis ojos no perciben lo intento compensar con el resto de mi abanico sensorial como si fuese un invidente casual.
Estoy tumbado sobre una superficie plana, compacta y rígida. Mis brazos penden de los hombros como péndulos de reloj dañado, mi cuerpo compungido y convulso se derrite en sudor. El frío se hace doloroso por su intensidad, intento incorporarme y adivinar dónde me encuentro y cómo he llegado hasta aquí. Al apoyar las palmas de mis manos siento que éstas se deslizan inseguras y caigo de nuevo sobre mi maltrecha espalda. Me quedo inmóvil sintiendo la contracción de los músculos.