Enamorado de tu sonrisa,
adicto a tus besos,
perdido por tus ojos,
muerto si no te tengo,
extasiado si tu piel y la mía se rozan.
Qué seremos, déjalo pasar, disfruta de mi en donde me encontraste, no preguntes mi nombre.
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dulce de leche dulce de algodon
dulces los besos con pasion
dulce la azucar dulce la miel
dulce tus caricias sobre mi piel
dulce el chocolate dulce el bombom
dulces los momentos entre tu y yo
dulce el caramelo dulce el licor
dulce tu mirada sin temor
dulce la nata dulce el turron
dulces los regalos de corazon
dulces dulces dulces de amor
son los momentos entre tu y yo
,,.60,,raz…………………………..dulces………………….
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Hola Morado. Bien tu texto. Bastante bien. Porque yo digo también lo que has puesto como resultado final: No preguntes mi nombre porque lo importante no es el nombre sino lo que en verdad, como dice Jesucristo cuando nos habla, lo que en verdad importa es lo que Dios sabe de todos nosotros y todas ellas. En fin. Algunos creen que lo del Espíritu Santo es una mentira piadosa de los muy piadosos o algún cuento de los que soñamos tanto… pero es mejor dejarles que sigan pensando así no vayan a ir diciendo por ahí que nosotros, los del Espíritu Santo, queremos convencerles. No. Solo estamos enamorados de una sonrisa. Nada más. Aunque lo del Espíritu Santo sea una de las tres Verdades de Dios.