Hace unos días durante el puente, cuando circulaba en mi coche por las carreteras de Orihuela, volviendo de la playa, sonó el movil, lo cogió mi mujer y la oí decir:
– Si, soy su mujer, el no puede cogerlo ahora, va conduciendo,estamos en la playa…..-No, no estamos en Madrid, estamos en Alicante….-Si quieres le digo que te llame después…-Vale, gracias, igualmete, ya se lo diré…-Hasta luego, adiós.
Me miró y me dijo:
– Era Alfredo, que queria hablar contigo, pero me ha dicho que no era importante, que nos lo pasemos bién en la playa, que ya hablaréis la semana que viene. Por cierto, por la voz parecía, que estaba borracho.
Yo pensé que no podía ser por que este hombre, hacía tiempo que se estaba medicando, y no probaba ni una gota de alcohol, por lo que no le dí importancia.
Alfredo es un compañero de trabajo al que conozco desde hace diez años. Es una persona peculiar, elegante en el vestir y de ademanes cultos y eruditos, de aspecto noble y bonachón, rondará los cincuenta y cinco años, y simpre me a parecido un personaje interesante. Llegó a mi empresa, después de que cerraran la otra donde había estado trabajando durante quince años, y despues de permanecer un año en el paro. Desde el comienzo le consideré un compañero trabajador, alegre y dicharachero. Siempre cumplia con su trabajo y no había quejas por parte de nadie. Con el tiempo observé, que cuando había eventos sociales de la empresa, comidas, cenas, despedidas de soltero y demás festejos, siempre acababa desparramando, perdiendo el sentido común y sin ningún tipo de inhibición. En una ocasión llegó a ducharse vestido en los vestuarios y era tal la cogorza que se lo tuvieron que llevar a casa, en otra se desnudó en el restaurante y empezó a bailar en calzoncillos delante de la gente, diciendo que se iba a desnudar del todo; y enotras los problemas fueron aún peores. En su casa también tuvo problemas con los vecinos y la policia, y bastantes más cosas que no vienen al caso.
En fin que la bebida habia acabado convirtiendole en un alcoholico, de los que estan abocados al fracaso. Los compañeros y la gente en general, en lugar de ayudarle, se dedicaban a hacerle beber, para reirse a su costa, y después criticar todo lo que ellos mismos incitaban. Faltaba constantemente al trabajo, y estaba en el punto de mira de los directivos de la empresa. Habiendo visto que su vida y su salud decaían estrepitósamente avisándole de un pronto final, acudió a la consulta de un médico, cosa que ya había hecho en innumerables ocasiones sin exito ninguno. Pero esta vez el médico le derivó al siquiatra, y este, empezó con él un tratamiento con el que lleva dos o tres años, y con el que no bebe y se le ve que está mucho mejor.
Yo me cambio con el todos los días, puesto que tenemos las taquillas juntas, y es una persona muy cordial, que casi siempre está de broma. Se observa que tiene problemas tanto anivel mental como físico, y cambios de humor y de personalidad. Pero con el tratamiento sobrelleva estos problemas de años de alcoholismo manteniendose ahora en abstinencia. Algunas veces está muy apagado, y otras sin embargo muy charlatán y bromista.
Yo me llevo con el muy bien y nos gastamos bromas y reimos mucho juntos. Algunos compañeros nos miran con mala cara, cuando nos ven hablar y reir a las siete y media de la mañana, e incluso dicen que no nos dejan hablar en casa, y que por esolo hacemos en el trabajo en lugar de estar callados. Pero yo sé que le viene bién sentirse querido y valorado, y por eso me da igual lo que pueda decir o pensar la gente.
Hoy cuando he llegado a trabajar, he oido decir que Alfredo ya, estaba otra vez de baja, que había durado mucho trabajando y que esto no era normal. En plan de guasa habla la gente de los compañeros, de los que no tienen ningún derecho a hablar. Alfredo es ´´el y sus circunstancias´´.
Preguntando a los jefes me he enterado de que estaba ingresado en el hospital…, en la planta de siquiatria, por que ha recaido de lo suyo; está diagnosticado de ´´Trastorno Bipolar´´.
Hoy he llegado al fondo del asunto del ´´colega´´ Alfredo, y me considero más amigo de el que antes, puesto que sé que necesita de la ayuda de las personas, que nos movemos a su alrededor, y que debemos ayudarle a sobrellevar sus enfermedades de la manera más digna posible; ya que estas se suelen dar en las personas de alma más sensible y débil, a las que la gente hunde en las arenas movedizas a la menor ocasión y despés les ponen el pie en la cabeza para que no salgan.
´´Coleguita´´espero verte por el trabajo, lo más pronto posible, para seguir riéndonos juntos y darte un gran abrazo de bienvenida, porque te lo mereces por luchador y buena persona.
Hasta pronto, y como tu dices:
Ponte bueno, ¡Y punto!.
Es de elogiar tu sentimiento hacia el compañero caído. Te aplaudo por esa posición de camarada que escucha la necesidad ajena y tiende la mano generosa a pesar del decir de los insensibles.
Me alegro de que Alfredo tenga en tí a un amigo y compañero con la sensibilidad suficiente para comprender su problema y ayudarle. Seguro que se siente respaldado por tu amistad.
Los otros que describes no merecen la pena, muchas veces la ignorancia lleva a la crueldad. Eso será, seguramente, lo que les ocurra a ellos.
Te felicito por tu solidaridad con Alfredo.
Un saludo.
Después de leerte me he visto identificada ..tengo un amigo virtual al que le ocurre lo que al tuyo , tiene cambios de humor constantes , pasando de la euforia a la depresión sin darse cuenta , lo ha perdido todo familia y amigos , el busca refugio en interent , escribe poemas desgarradores , le comento a menudo y entiendo lo que le ocurre , me agradece la comprensión hacia el porque a veces actúa de una forma “especial” , por ello hay gente que le ha dado la espalda . Hay que ponerse en el lugar de los demás para entenderlos . Un beso
Ojala toda la gente sintiera la necesidad de tender una mano a la persona que lo requiere.
Ojala todos seríamos mas solidarios de lo que somos, sería un paso adelante para este mundo lleno de insolidaridad.
Tu y yo somos conscientes de que nuestro compañero y amigo Alfredo se merece lo mejor, espero verle pronto entre nosotros y que siga luchando en su recuperación.
Los compañeros que muestran esa insensibilidad hacia él no merecen de su persona ni de la nuestra.
Gracias por este reconocimiento a Alfredo, Kiowa.
Un abrazo Alfredo