Archivo de la categoría: Diarios

Diarios

Diario de un profesor: El día final

A la atención de mis queridos alumnos y alumnas.

¡Cómo retumba una clase vacía! No hay jornada más cruel, más destemplada. Cuando hoy la última alumna se ha despedido, se me ha hecho un nudo en la garganta. Ellos se van, no retornarán hasta pasados casi tres meses, o quizás ya nunca. ¿Volverán todos? Sólo una madre o un padre podrían comprender este sobrecogimiento, propio de cuando los hijos se van de viaje y sientes el desgarramiento del alejamiento. ¿Cómo cambiarán y cómo seguirán siempre siendo “ellos”?

La edad de la verdad

“Lost in translation”, otra película que nos revela el extravío de la soledad humana creciente con la edad.

Unos, los suizos, dicen que la edad no juega ningún papel excepto en los quesos; otros, los franceses, que la edad es importante sólo en los caballos; y terceros confirman que cada persona tiene la edad de su corazón (esto, en sentido fisiológico no puede ser más cierto, excepto en los trasplantados).

Almas cansadas

Hay días en los que el alma clama que está mala

En ocasiones la melancolía, que es la dicha de estar triste, nos envuelve y paraliza con su dulce sopor que nos aproxima al infinito. Hay ciclos de bajamar, y fases de pleamar. Días de llorar, y días de afirmar. El alma se ha humanizado tanto, se ha acoplado tanto al cuerpo, se ha somatizado tanto… que también jadea, también se cansa, también se agota, y también se harta.

Marcianos entre nosotros

Están aquí, se han infiltrado y pronto conquistarán la Tierra.

No creo en los OVNIs, pero esto es completamente diferente. No sé cómo han aparecido, ni siquiera de qué planeta son. Es probable que sean criaturas venusianas, porque la mayoría adopta una apariencia femenina. Parece que no se adaptan a “comportarse” exactamente como nosotros, lo que permite detectarlos por sus “excéntricas costumbres”, a pesar de su aspecto similar al nuestro.

Paloma encarcelada

Fue todo muy fugaz. La papelería estaba casi vacía. Mientras los pocos madrugadores comprábamos la prensa, entró volando una blanca paloma. Quizá prefirió la caldeada atmósfera del recinto ante el frío matutino de Getxo. Aleteando sin cesar, su habitual arrullo se transformó en un angustioso bramido, mientras sobrevolaba y chocaba repetidamente contra el cristal del escaparate, tratando de huir de aquella transparente jaula irrompible.

Algunos alumnos…

En esto de estar en la vida y construir su sentido he tenido la suerte de convivir con jóvenes dispuestos a resolver el dilemas a quienes no les gusta leer y que sostienen teorias novedosas sobre el “presente” y sus posibilidades. Sienten, que el principio de Realidad les es hostil, y sostienen…que la vida es un obstáculo para el logro de la Felicidad.

Intimidad

Hoy escribo desde la dimensión de muchos sentires. La letra se vuelve menuda y mi pluma se escapa del interlineado. Hoy tratro de expresar algo diferente. Ha venido a verme. Es callado, pero se insibnúa en cada movimiento, como si se tratara de una caña agitada por el viento. Me mira. Me observa. Calla. Está. su presencia, evocadora de cualquier goce, se inhibe trasteando con los dedos sobre la mesa llena de cigarrillos. Una vez más he vuelto a equivocarme.

Puesta de Sol

Me encuentro aqui sola, en mi habitación frente a la pantalla de mi ordenador. Son las 2:56 horas de la madrugada, estoy viendo mi correo atrasado y escuchando repetidas veces la última canción del cd Café del Mar Dreams Volumen 2.
Cada vez que la escucho, regreso a la playa es como si sintiera la brisa acariciándo mis cabellos, la arena rozando mis pies y el agua invadiendo suavemente mi piel… y mientras, sentada en la arena, veo como el Sol decide dejar paso a su amada Luna mientras desaparece tras un fondo rojo y negro. Siento una paz interior que nunca pensé tener, la esperanza es cada atardecer. Sigue Leyendo...

Ya no te amo

A ti que sé que nunca leerás esto. Sólo decirte que te amé tanto que mi corazón ha estado herido mucho tiempo y cuánto significaste para mí en una etapa de mi vida, por desgracia nuestro amor no pudo ser. No éramos tan distintos, pero no podíamos estar juntos sin discutir y sin ofendernos. ¿Por qué me dejaste de querer? yo siempre te amé y hasta mi alma hubiera vendido al mismísimo diablo por ti. También sé que no te tendré más, que nunca me abrazarás y me dirás dulces palabras al oído. Pero quiero recordar con el corazón ya repuesto de las heridas del alma los momentos que pasamos juntos.
Las tardes de sábado en tu casa escuchando “Porcelain”, tus labios acariciándo los míos y tu suave piel rozándo la mía, yacer juntos y contar las estrellas que parecían preciosos brillantes ante nuestros ojos. Ya no veré más amaneceres contigo, no nos cogeremos las manos, ni miraré tus preciosos ojos siempre suplicantes de amor, ni apoyaré mi cabeza en tu pecho. No necesito que me quieras, sólo deseo fervientemente que siempre te acuerdes de mí y sepas lo que has perdido. Mis heridas están curadas y he resurgido cual ave Fénix. Ya no te amo. Sigue Leyendo...