Luz de mi alma
quizas no me veas
pero aqui estoy,
perdido en el aire
volando,buscandote.
Luz de mis ojos
tal vez no me escuches,
tal vez mis palabras
se diluyen en el viento,
sin llegar a tus oidos.

Este nuestro pequeño mundo
aparetado del lugar y de las dudas
se mueve al compás de los milenios:
una especie de sentido hitórico
que va más allá de las edades
y transforma toda nuestra amplia especie
en un momento infinito.

Mi cielo que maravilloso
es llenarte de caricias
besar tu cuello y tus oidos
dejarme llevar por tus suspiros
que se unen dulcemente con los mios
ver tu sonrisa picara,
y sentirme tuyo
cuando me acaricias
sentir tu magia
y tu dulzura, mi cielo
me conmueves.

Sol de mi vida
y estrella que iluminas
cada una de mis noches
te pido que me regales
cinco minutos de tu tiempo,
para mi es muy importante.
Simplemente te pido
diez segundos para perder
mi mirada en tu mirada
y crear un nuevo universo, nuestro universo.

Viento del Sur que traes en tus entrañas
un halo cálido y febril.

Viento de Poniente
suave y silente

Tomad mis palabras
hacerlas llegar a su lado
que se haga el milagro
susurrárselas al oído
acariciando sus sentidos
que se sienta por mi querido

Luna lunera cascabelera
Los sauces lloran sobre las eras
La punta de los abetos te acarician la cara
Cara de luna lunera cascabelera
Tus ojos hablan del sinsabor del tiempo
Todo se detiene por un momento
Sombras sombrías dejan su lamento
Reflejos de la luna lunera cascabelera
Los sauces lloran sobre las eras
Rueda su lamento por las laderas
Pero tu cascabel lo alumbra todo
Cantan búhos y lechuzas en la pradera

Mil veces Lina
Inevitable te llama
La voz de mi pluma fina.

Voz que siempre proclama
Ese tu estilo con alma
Cuando tú eres la dama
Enamorada en la esquina
Siempre junto a la encina.

La otra es sólo quina
Inocua que se elimina
Nada más cuando mi llama
Arde en tu boca y culmina.

El ruiseñor y su trino

El ruiseñor y su trino
Sueños de un niño extinto.
En rincón oscuro,
Mundo divino
Jaula de oro distinto
Donde despliega alas
El callado, frágil discurso
De pensamientos líquidos.

Eran cuatro jinetes
por los campos de Castilla.
Uno llevaba una espada
de oro que relucía;
otro llevaba un puñal
de plata con pedrer´´ia;
otro llevaba una daga
de bronce que resplandecía
y otro llevaba una flor
mientras siempre sonreía.

Tiene el maestro razón
En su ardiente locura
De sacrificios nutrida.
Dicen bajos espíritus
Que no comprenden la melodía de su voz.
Lo escuchan somnolientos
Toman de su acerbo
Las metáforas,
Y como parásitos las engullen,
En discursos falsarios, purulentos.

La primera vez se ama
como se ama al primor
de la primavera en flor
cuando está verde la rama.

Entonces es cuando el alma
sirve para dar calor
a ese sueño que es valor
que se vive sin la calma.

El hombre pasa
al costado de la vida
que siempre lleva cosida
a su alma de cantor.

Pasa buscando el hombre
la verdad tan deseada
que siempre está transformada
en su brillante soñar.

Hela, yo
te besaría los labios
pero antes
pondría
los mios
suavemente sobre tus mejillas.
Y
quizá, después,
te besaría la frente, y los párpados
cerrados. Igual antes, incluso,
te cogería las manos, dedo
por dedo, rozando la palma

Laguna que invita a la sed
Inagotable de mis sinos
Ninguno de ellos dañinos
Al besar tu boca sin red.

Los tiempos ya han der ser
Infinitos torbellinos
Nacidos en los molinos
Al compás de nuestro crecer.

Por el camino largo
sigue marchando… sigue marchando…
un caballero con alma
que va soñando… que va soñando…

En las laderas las fuentes
están cantando… están cantando…
versos de agua limpia
que van granando… que van granando…

Las horas leves y lentas
Iguales que seres con alma
Nadan en el reloj de la calma
Al crecer diez mil violetas.

Las horas dulces y amargas
Iguales que el tiempo pasado
Nadan como un enamorado
Al compás de sus adargas.

Si tengo que morir no importa
yo cojo la maleta
y me voy…
hoy mismo si es necesario
me marcho de este escenario.

En el armario te dejo
esta distancia de hombre
que, aunque soy más bien pobre,
no seré nunca un pendejo.

Nunca podrá la lejanía apartar de mi memoria tu recuerdo,
no hay distancia más corta que la del pensamiento
a través de el te siento a mi lado,
el suave céfiro me trae tu aliento,
tus susurros, tus besos.

Y en mis sueños tomas mi mano
y nos adentramos en un mundo onírico,
especial y único
donde solo cabemos los dos.

Busco y me aferro a un aliento
que envuelva mi ser hoy gastado
que insufle un aire de sentimientos
¡Por Dios! que casi lo he logrado.

Dedicado a Carlota

¿Ves aquel joven de allí, con el cabello oscuro?…. Pues en un cercano pasado de la infancia, se asomó a un charco que la lluvia se había descuidado sobre la tierra compactada del camino, y en el reflejo vio asomarse un rostro.
Luego, moviendo su cabeza miró al horizonte, más allá el Sol jugaba a esconderse tras una nube blanca, bonita y muy tranquila.
Entretanto, llegaba un atardecer con una tarde cogida del brazo, se fueron sentando sobre las montañas de la lejanía…
Poco a poco fueron deslizándose hasta desaparecer.
¡Por allí cerca una vela! Encendida sobre una mesa, parecía insinuar “buenas noches”. Luego tembló, se apagó y humeó. Sigue Leyendo...

A mi lado sueles reposar quieta
porque así no escucho ese triste rumor
de que llevas una vida secreta.

De que en sábanas, compartes tu sudor,
te excitas volátil cual queroseno,
y abres tus poros, perdiendo tu pudor.

Duele escuchar de tu boca el veneno
mientras a mis ojos miras tranquila
dando la mentira, como algo ameno

cuando no es más que un cuchillo que afilas
con el esmeril de tu vida diurna,
que al dormir lo usarás como Dalila.

Que me lleve el río
si no puedo verte
entre los entresijos de la corriente.

Que me lleve le río
si entre sus aguas
se pierden mis delirios y deseos.

Te conozco tal vez poco, o menos nada
o por lo menos reconozco que tu belleza agasaja
al que poza y se enamora en tu mirada
rostro hermoso son tus labios o tu alma
o es tu imagen que encierra tanta calma
testigo al fin de tus ojos, tus labios, esa cara
hechizado de la presencia tan cercana
que triste hoy recuerdo de ti no tengo nada
y aun así tu recuerdo enamora al solo ser imaginada.

Bajo la tarde silente
van dando sus pedaladas
los ciclistas por explanadas
con el corazón caliente.

Todos forman la serpiente
muticolor por las Landas
que va surcando las tandas
de su vaivén ascendente.

Me han sacudido las hojas, me han dejado las hojas mareadas, desamparadas. Esta mañana por las tempraneras albas, con palos han llegado y buenos azotes me han dado.
Canturreaba la gente palo a palo. De vez en cuando bota de Vino, que bien viene, para quitar la sed según dicen.
Con mis hermanos, allí en medio. Que dolor, bien fuerte me han sacudido las hojas.

Nuestras amadas criaturas, desapegadas a la fuerza, nos han arrebatado. Nos han separado golpe a golpe. Nuestras amadas criaturas son llevabas para ser aplastadas,tortutadas, con sus lágrimas embotelladas. Y sus bocas cerradas con etiquetas, al comercio más o menos justo serán llevabas. Y me han sacudido las hojas. Sigue Leyendo...

Dame tu amor mi niña
Aunque el amor para ti no exista
Y la nada se pierde en el todo
Dame tu amor mi niña
Que viajare a los valles
Y buscare morir por entre
Las montañas

Te gustan las personas
Sus argumentos
Sus sentimientos
Pero donde esta la verdad
La verdad es una paloma herida
La verdad es una llama encendida
La verdad es el tubérculo escondido
La verdad es ese pichón en su nido
Amamos a la verdad
¿Pero la tenemos dentro?
No, siempre habrá que buscarla

Caminando contigo
por la vereda,
rumbo a un destino
Tú a mi me llevas.

El sensual movimiento de las caderas femeninas.
El candor de su flor perfumada,
despiertan en el hombre la locura
dejándole inconsciente en la espera
de poseer tan tierna fruta
antes de que el día amanezca.

Historia es tu mirada
de ángel nacida de ensueño.
Un sueño
en medio de la privada
estancia donde me duermo.

Historia es tu mirada
por la hierba de este suelo.
Un duelo
en medio de la empinada
cuesta que sube al cielo.