Acabo de leer el comentario de Javi. En esto de entender lo que pasó y pudo ser, todos coincidimos que los inicios son “inocentes”, pero la vida no hace propuestas minimalistas, sino que apuesta por la Masa como unidad de medida de todo. Todo lo que tiende a ser prohibido fue permitido. Desde aquí contemplaremos un espectáculo que sólo concierne al poder y a la Ley. Se estaba viendo venir este dejar que la Ley juzgue la totalidad de los actos y que la Justicia sea un duro cinturón que apriete las conciencias. No deja de ser un acontecimiento deportivo el que compitamos por ser “los más y mejor”. El cuerpo y salud son patrimonio de la Seguridad Social y de las familias.
Falta una creatividad urgente en la juventud. Las sugerencias de la sociedad del consumo, como forma de vida, nos sitúa en dejar de ser para formar parte del número. Lo doloroso es que cuando vemos a un ser borracho y sucio, extendido entre cartones, oliendo y perdiéndose en los Infirernos de tercera…entonces algo comienza a sugerirnos que seremos incapaces de caer en el banco, en las aceras, o pedir, gorra en mano, mientras los paseantes hacen tiempo para ver la tele. Esta falta de creatividad nos somete porque somos capaces de copiar, pero de crear. Es inevitable que el Botellón forje historias, refleje realidades, acorte vidas y seduzca a la Masa, porque aceptamos, muy mal, que desconocemos casi todo de la sexualidad y sus placeres, porque leer nos conduce a historias de super ventas y el cine va muriendo entre la Mancha obsesiva y las Montañas edulcoradas, donde los vaqueros sólo juegan a ser adolescentes calientes y están muy por debajo de lo que es la homosexualidad pura y dura. En este impacto de realidades refulgen las búsquedas de indiferencias hacia todo. Ser joven es un estado mental y no una condena a muerte prematura. Nos olvidamos de la vida para entrar en el juego de las ruletas rusas que nos dicten los que son güais.
¿No será tiempo de empezar a darse cuenta?
2 comentarios sobre “Cuando el límite se llama Masa.”
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¿No será tiempo de empezar a reconcienciarnos con eso de saber qué es la alienación a la que nos somete la sociedad de consumo?. Creo que hay fuerzas de poder que intentan siempre inmovilizar a las masas juveniles por el método de eliminar nuestras potencialidades a través de la eliminación de nuestras conciencias.
Saludos, Carolina:
Estoy de acuerdo contigo, la juventud es un “valor” que el Poder siempre se plantea como “manipulable”. Es lógico que se crea estar viviendo una libertad elegida, cuando la realidad es que “el planteamiento ya está hecho, creado y decidido por un no-se-sabe-quien. Freud y Jung…ya hablaron de una “grave enfermedad en la cultura europea. No es extraño que la “alienación” forme parte de una huído de la realidad, porque el compromiso psicológico no es soportable. Toda huída es una opción, pero la huída de la concienca del “sí mismo” es una grave derrota, cuendo se está sano y cuando se desprecia la lucha hacia los logros del futuro. Quizá me sea difícil, por mi edad, vivir lo que la juventud experimenta…Me limito a observar y comparar…El resultado es obvio: alguien sabe que toda ese juego está dirigido. Un saludo.