Esperando un nuevo Amanecer

Llegan, desde el horizonte ausente,
los vuelos silenciosos de los pájaros;
en la albura de la soledad, los ojos se van cerrando,
buscando un lugar,
donde apagarse.
El Poeta, palpando los suaves e inofensivos corceles del tiempo,
espera en silencio su anunciado adiós.
Porque las montañas azules son su esperanza
y los intensos colores de nuevas madrugadas,
precisan de ser vividos.
El poema asciendo en la espesura de la claridad,
donde la verdad sentida añora un adiós
y un último poema.

Cuando el jardín secreto de las palabras,
de las fluyentes aguas de que se improvisan
tornan en malabares,
la plaza se llena de voces que ensalzan,
de simples poemas,
de mil alabanzas, porque sí.
Hoy serán poemas sencillos,
elevándose en grandiosidad hasta el infinito
marcado por ritmos y cadencias.
El Poeta, evocando la inocencia de los dulces dias vividos,
añora las soledades calladas,
la huída del bullicio,
la constancia emprendedora.
Cuando supe decir adiós,
fue primero mi mano la que expreso el gesto.
La palabra vino presta a ser sonido
y quedó, solamente,
para momentos silentes, donde todo se reduce
a un gesto invisble,
a una mirada,
y a un adiós.
Sin métrica, ni verso atado, ni encadenado compás,
ni en posible referencia,
no cabe esperar ausencia cuando el primer paso
va marchando el principio de un camino.
A ti y por ti, espacio invertebrado,
que supiste ser rosal trepador de mis escritos,
levanto mi mano, en un adiós que el barco azul
llevará a otros mares.
Lugares, donde las palabras regresen a su original estado,
en la plenitud callada de las horas y los dias.

2 comentarios sobre “Esperando un nuevo Amanecer”

  1. Es en tus lugares de encuentro con los horizontes de las montañas azules donde yo centro esta sensación de amanecer. Mañana nos habremos ido todos y en el camino habrán quedado los escritos poéticos y prosaicos que, como los rosales trepadores que tan acertadamente simbolizas en tu poema, serán la constancia perpetua de que hemos estado viviendo en el país del sueño, el único país realmente vital.

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