F.S.H.

Formamos Sociedad Humana. ¿Qué quiere decir, en realidad, esta frase?. ¿Hasta dónde alcanza su verdadera identificación?. Muchos son los que se preguntan ¿qué sentido tiene esta especie de mundo formado por los seres que en teoría se llaman humanos y en la práctica distan muchos sentimientos de serlos?. Entiendo que muchos duden de la verdadera expresiuçon humana. Lo que no entiendo es que otros muchos odien la expresión Formammos Sociedad Humana porque anteponen antes sus propias identidades avarientas que esa magnitud divina que creó Diois como Humanidad. ¿Tan difícil resulta comprender que todos pertenecemos al mismo Universo?. Podría escribir todo un libro de dos mil ciento ochenta y nueve páginas titulado F.S.H. por ejemplo, para ver si de esa manera todos los que no entienden lo de Formamos Sociedad Humana comprendieran, por fin, qué significado tiene vivir en la Tierra.

A veces me preocupa el hecho de que el odio reine en el corazón de tantos llamados teóricamente seres humanos. A veces quisiera poder explicar al Mundo que el mundo, esa propia expresión que hace a los seres humanos grandes, fue creado para el Amor. Pero ellos luchan (como si el Amor significase pelearse) por pequñas migajas de amores pequeños sin preguntarse si en realidad lo que vale es el Amor con A mayúscula de Autenticidad.

No sirve para nada seguir insistiendo con eso de los amores libres que son tan falsos que siempre llevan a un callejón sin salida y se mueren incluso antes de haber llegado la primavera. Es necesariio entender, de una vez por todas, que es el amor noble el que construye y edifica las bases del Amor verdadero. Es hora ya de dejar aquel frustrante pasado que comenzó en los años 60 del siglo XX y volver a retomar el camino verdadero. ¿Es posible recuperar ese trozo de historia y de vida perdido, para muchos y por varias generaciones, para volver a ser tal como éramos?. Sí. Es rotundamente posible… pero sólo para quiernes entienden la verdad del Amor.

Algunos creen que escribo en vano pero es que olvidan que la vanidad no es una característica de mi persona. Con total sencillez os cuento relatos que son verdaderos y verdades que son relatos. Ambas cosas son positivas a la misma vez que edifican y califican a los seres humanos como tales. No vino Jesucristo a decir que somos libres sin condición alguna como falsamente nos enseñaron la mayoría de los líderes juveniles de los citados años 60. No. La condición es que explicó qué es la nobleza a la hora de amar un hombre solo a una sola mujer. Esa es la condición. Esa es la conciencia. Esa es la libertad.

Hay que saber entender las verdaderas bases de las palabras de Jesucristo. Es absurdo lo que muchos han dicho de Él. Él no se anduvo con medias tintas como hicieron la mayoría de los funestos líderes de los años 60. Muchos son los que han ofendido a la verdad diciendo que Jesucristo fue el esposo de María Magdalena y otras atrocidades aún más elevadas con tal de conseguir la fama ante el mundo o incluso un premio Nobel para decir que son grandes. Eso está tan lejos de la realidad como creer que Jesucristo habló de la libertad como algo sin sujeción alguna, como un desmadre colectivo que es lo que nos enseñaron esos miserables líderes de la sexualidad indiscriminada sin orden ni sentido alguno. Falsos. Sólo fueron falsos seres que de humanos no tuvieron más que una capa de barniz bajo la cual sólo existía el vicio y la inmoralidad. Y no me importa si me llaman moralista por decir esto porque no lo soy. Yo amo la Libertad y el Amor basado en la Libertad (el amor noble), pero jamás el destructor “amor libre”. Son dos cosas totalmente opuestas. Jesucristo basó el amor humano bajo el propio dominio y el dominio propio que cada ser humano debe tener sobre su propia persona. No vale con decir que si todos lo hacen es porque tienen la verdad. La verdad no es posesión de todos. La verdad es posesión solamente de quienes la poseen.

Son los hombres, cuando de verdaderos varones se trata, los responsables de hacer entender a las mujeres que el Amor consiste en la fidelidad ciega, en la entera fidelidad (no compuesta de migajas de momentos superficiales sino completamente entera y sin resquicios) del uno para con la otra y de la una para con el otro. Yo creo firmemente en los Milagros de la Transformación y por eso sé positivamente que estamos a tiempo de volver a ser tal como éramos antes de que a muchos y muchas les destruyeran los falsos líderes. No me cansaré jamás de decir y de predicar que tal como éramos significa ser de nuevo los jóvenes felices y alegres de la nobleza, del espíritu sano y no contradictorio; aquellos jóvenes que sabíamos de verdad lo que queríamos para nosotros mismos y para los demás.

El futuro puede ser, sin duda alguna, un regreso a aquel pasado feliz antes de que lo estropeasen todas las ideologíaas sociales y políticas que resultaron ser negativas a la hora de la verdad. Negativas y frustrantes para muchos millones de seres que quisieron ser humanos pero les obligaron a no serlo o les hicieron equivocarse en los caminos elegidos. Si tienes fe todo es posible. Todo es alcanzable si tienes fe. Si tienes fe todo es simplemente realidad si crees que sí, que de verdad Jesucristo anida en nuestros corazones. Porque el Amor noble y verdadero no es asunto misterioso ni ocultista como lo es el “amor libre”; sino algo que está tan a la luz del sol que muchos no desean verlo… más su visibilidad es tan nítida que otros lo entendemos, lo comprendemos y lo asumimos como forma de ser y de vivir. Es el camino, es la verdad y es la vida.

Es necesario desarrollar una nueva sociedad mundial; un nuevo pensamiento que englobe las virutdes cristianas no por religión sino por forma de vivir continua y continuada. Ahí radica esa Eternidad que Jesucristo nos prometió y esas Transformaciones que Él es capaz de producir en nosotros y nosotras. Hay que abrir los ojos para amar. Es necesario abrir los ojos para amar y poder visionar este presente, aquel pasado y el próximo futuro coincidiendo en un sólo punto de Luz. Hay que abrir los ojos para contemplarnos las miradas sinceras y honestas; las miradas de los seres humanos nobles. Por eso mirar con los ojos abiertos es huir de la muerte y abrazar la vida entera y eterna. Soñemos pues. Soñemos a lo grande, con grandes sueños, pero con los ojos abietos para no volver a caer en ese oscurantismo que tanto dañó a la mayoría mundial. Ese será nuestro éxito final. Y Él se encargará de hacer que cumplamos el F.S.H. El Formamos Sociedad Humana.

2 comentarios sobre “F.S.H.”

  1. Diesel,
    verdaderamente me siento felìz de haber leìdo tal reflexiòn!
    estoy totalmente de acuerdo contigo, muchos pueden pensar efectivamente que somos soñadores, pero lo que ignoran es que los sueños son parte fundamental para motivarnos a hacer algo bueno para nosotros mismos. Me refiero al hacer algo para ser y no para tener.
    Los que tenemos este sueño,de cambiar mentalidades hacia el amor noble, nuestra misiòn es: seguir cambiando vidas con todos a nuestro alrededor.¿còmo? con ejemplos en la vida diaria, poemas, reflexiòn.
    Espero leer màs de tì como siempre.

    Lauralima

  2. Gracias Lauralima. No abandones nunca. Nunca se debe abandonar porque otros, incluyendo también a la mayoría, no nos crean. No importa ser de las minorías si sabemos a donde pertenecemos. He visto a muchas mayorías caer por el propio peso de sus ignorancias. No importa cuántos seamos… lo importante es que somos verdaderos. Sé que me entiendes y por eso te aplaudo. Y no dejes de esribir cuando sientas deseos de escribir… aunque la mayoría quiera olvidarlo. No importa. No importa si la mayoría nos olvida y hasta puede ser mejor que nos olviden para ser más libres. Lo importante no es que nos olviden. Lo importante es que nosotros y nosotras no olvidamos nuestra fe. Un abrazo amistoso.

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