La carta

No sabía lo que era una carta,
jamás me habia llegado ninguna,
cuando sonó el timbre no lo imaginé,
salí en gayumbos a la puerta principal.

Una chica vestida de amarillo y azul,
con un carro de compra también amarillo,
me entregó después de verificar mi identidad,
un sobre blanco y perfumado en la mano.

Me dijo: “es certificada espero respuesta,
abrí un papel muy raro como pegado,
dentro ponia:” Te amo con todo mi corazón”,
miré al pivón de amarillo titubeante.

Me acerqué a ella y la besé en los labios,
ardorosamente jurándola amor eterno,
sentí en la cara un grandísimo bofetón,
e inexplicablemente una voz que decia:
“habrase visto,que desfachatez,
intentar abusar de una pobre cartera,
hay que ver como cambian los tiempos”.

3 comentarios sobre “La carta”

  1. Seguro que era una carta de Tráfico, que contenía una multa ¿no?
    Seguro también que estabas recién despertado y eso te llevó a tomarte ciertas licencias.
    Jajajaja. Muy bueno, kiowa.

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LA CARTA

Te escribo esta carta con manos sedientas
complaciendo a mi alma que desgrana
uno a uno los pétalos del olvido
de la flor de ese amor divino
que era nuestro y que tu ausencia profana

en las noches solitarias me pregunto
donde esta el ardor que salpicaba nuestra cama
que embrujo se clavo como una diáspora
en medio de tu corazón desprevenido
alzando el vuelo con ese amor que de mí escapa

2 comentarios sobre “LA CARTA”

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