Podría mal mentar mil desamores,
también puedo contaros mis mil desilusiones,
de hecho, vivo preso de sus enrredos.
Vivo en mis ganas y duro porque nunca trovaron sus llantos,
porque no hay que cantar al alba ni dormir en la oscuridad
sólo rompe a sentir que la poesía no nace en el corazón oscuro,
ni en la más risueña sonrisa,
si no en torno a quien somos y,
sobre todo,
en torno a quiénes seremos.
Donde duermas hoy y despiertes mañana,
no importa,
sólo ten presente poesía seremos siempre.
bellas palabras que son abrazadas por la poesia!
tu poesia, me encanto!
Rodearnos de poesía es lo más alentador que existe.
Tu poema es un canto a la belleza. Gracias.
Está bien, Morado. Donde dormimos es, precisamente, donde despertamos para iniciarnos nuevamente en este mentar amores, desamores y circunstancias más o menos amorosas. Hoy puede ser un día de amor o puede ser un día perdido. Como dices en tu poema “vivo en mis ganas”. Yo vivo en mis ganas que son mis deseos que son mis sueños y que son mis mil maneras de amar a una sola mujer con la que permanezco unido por siempre y para siempre. Un abrazo cordial.