Fernández, Carrasco, Legrá, Durán, Velázquez, Rodríguez, Calvo, Heredia, Folledo, Galiana, Ben Alí, Sombrita, Urtaín, Kid Tano, Young Martín, Leblanc… época dorada del boxeo español… una épica que arrancaba desde los tiempos de Baltasar Sangchilí y Paulino Uzcudun. Algo así como una burbuja llena de glorias que se harían legendarias intentando ahuyentar el hambre y la sed de hacerse mitos entre los cuadriláteros de las doce sogas. Alguna vez, pensaba yo, llegará el momento en que todo esto será solamente un recuerdo para los viejos aficionados del Campo del Gas, la Plaza de las Ventas y el Palacio de los Deportes (de Madrid todos ellos) en medio de esta jerga de upercouts, crochets, jambs y demás golpes a la vida. Yo resistía al afán contradictorio de ser o no ser alguien importante en mis oficios.
Archivo por días: 8 noviembre, 2011
Buenas noches Charles…
La belleza del fuego
98 sin plomo
Una carta y una flor
Casa siempre abierta para vosotros, casa de las flores que no perfuman, al menos como los aromas impregnan nuestros rostros, ellas perfuman de un modo silencioso, invaden los cuerpos de los que en general se acercan a ellas con olfatos demasiado dirigidos por la forma, forma de flor…
Necesito detener la carta que cada quince días escribía a sus sobrinos, algo casi impió se habia deslizado, obscenas sus manos, algo del orden de la desmesura.Sacudío la cabeza, acaricío su cuello e intentó escuchar Brahms.
Sabiá pero no quería pensar que algo había sido escrito y ella detestaba la violencia, la carta exudaba violencia.
Ella solo rogaba que Brahms no acabase…
ROSA EN UNA SEPULTURA ANONIMO
El torerillo Luján.
– ¡Madre, madre, que debuto por fin!.
– ¡Hijo mío!… ¿no ves que ese afán por ser torero te va a llevar a la tumba antes de que cumplas los veinte años de edad?.
– ¡No se preocupe madre… que voy a triunfar!. ¡Ya estoy viendo en sueños los carteles taurinos por toda España con mi nombre en primer lugar!. ¡Nada más y nada menos que Pepe Luján “El Hortelano”!. ¡La fama, madre, la fama!. ¡Me esperan la fama y la gloria!.