Y en la soledad sintió deseos de que la noche llegara a ser tan cierta y verdadera como ese pedazo de intensidad que se le pegaba al cuerpo con el peso adormecedor de todos los sentidos. Y en la soledad persiguió silencios para adentrarse en la búsqueda de la incógnita de su propio misterio. Y en la soledad penetró profundamente en un llanto hasta que la luna acarició su rostro y le dio un beso plateado que le hizo rememorar nuevamente aquella pegatina que le había regalado un desconocido en señal de amistad…
Archivo por días: 17 junio, 2005
Nunca el día es el mismo
Cuando espero a que llegue el momento, me pongo muy nervioso.
Normalmente siempre espero en mi habitación y ya imagino la foto de la ciudad, cuando nos hace protagonistas.
Es entonces que no me siento igual que en otros ratos, hoy en día apenas me acuerdo de ellos.
Espero que esta nueva sensación dure mucho tiempo.
Finalmente, me fui al bar donde quedamos y me senté en la terraza.
Pedí un café solo y repasé en mi teléfono móvil todos tus mensajes.
Me di cuenta entonces del verso que tú y yo añadimos este pequeño y poderoso drama llamado vida, me di cuenta que desde que estás…
Estás ahí para el silencio
Y en la soledad sintió deseos de que la noche llegara a ser tan cierta y tan perfecta como ese pedazo de intensidad que se le pegaba al cuerpo con el peso adormecedor de todos los sentidos. Y en la soledad persiguió silencios para adentrarse en los huertos de las búsquedas incógnitas de su propio misterio. Y en la soledad penetró profundamente en un llanto hasta que la luna acarició su rostro y le dio un beso plateado que le hizo rememorar nuevamente aquella pegatina que algún desconocido le había regalado como seña de identidad.
SIN TÍTULO
Se me cae una lágrima desde la espiral
quizás por un llamado indescifrable,
un ala rota, un beso sin destino,
o talvéz por la visión de una cruz tentadora
o de una tumba rechazada.
Gustav Mahler, su sombra,
entró como una exhalación,
abrió mi corazón a los viejos dolores,
dio un paso al abismo y se robo la luz.
San José, 1988.
Al compás del concierto barroco
Un extranjero escapado de las páginas entintadas de Camus llega también allí, al retablo donde Kandinsky ha intentado fusionar todos los colores… los endemoniados dostoievskanos danzan acaloradamente persiguiendo a la Venus de Milo que sigue esforzándose con enamorar al Pensador de Rodin. Pero el Pensador tiene muchas circunstancias que lo sujetan a su silla. Y La Gioconda sonríe melífluamente… Alrededor de ellos están bailando las ninfas que loan a Sherezade y Antonio Machado se ha acercado levemente, como de puntillas, para abrir la puerta y que entre el sol de los campos sorianos. En el exterior, bajo un cielo azul albertino, Platero trota como una suave mariposa mientras abrevan en la fuente el Rocinante de Quijote y el Bucéfalo de Alejandro… la Gran Madre Selva se ha llenado de cultura y hasta los indígenas shuaras buscan descifrar las amplias estancias por donde caminan todos los colores del entrañable Vorem, este Eldorado descubierto por los poetas que aman a las corpusculares esferas de Copérnico…
Lo eternal del matrimonio
Te amo y te amaré mucho más allá de la muerte y, por encima de creencias, cláusulas, contratos, declaraciones, presupuestos, convivencias, ambiciones, leyes religiosas o civiles, tratados y textos… tú y yo estaremos tan eternamente ligados en el sentimiento que nuestra unión perdurará hasta más allá del infinito, hasta que, una vez superada la vida, una vez superada la muerte, una vez superada la existencia, una vez superada toda clase de materia y de espíritu… tú y yo seremos una sola dimensión en el misterioso, enigmático y sin medida del éter de todos los Universos. Te amo y te amaré mucho más, mucho más, todavía muchos más… hasta que ya no quepa distancia ni quepa medida ni quepa la Razón… hasta que solo entre en nuestro espacio el Latido del Amor y se quede aquí, con nosotros, más allá, más allá, aún todavía más allá de cualquier definición transitoria, transitiva y trasfiguradora de la Realidad… porque tú yo somo más que todo eso.
Concierto Barroco en un solo movimiento
Amplias estancias por donde caminar mirando los colores. El poema se diluye y se transforma en cuádrigas de caballos romanos, en ejercicios de literatura noble, resonante y certera. Borges aparece bucólico y pastoril apoyado en su bastón de plata mexicana. Minotauro esgrime su cabeza hedionda, su perfil de devorador de vírgenes, su talante de domador de hombres. Suenan los pasos a los compases acristalados; trompetería de un órgano barroco que invoca a lo divino en un baile de máscaras. ¡Venid a la celebración! Descienden por la escalinata de mármol los descendientes de los ángeles, los sabios que crearan anacondas y papagayos dorados. Todos se van sumergiendose en planos disonantes hasta perfilar la sinfonía de los invisibles. Es tan grande la intesidad que los pájaros se alejan y la estancia se cubre con velos caídos desde los párpados cerrados de Borges, de Goitisolo, de Pablo Neruda.
Pablo no deja de cantar a la noble virtud de la poética cebolla, al ajo, al escarabajo que hace de la tierra un continente virginal de vocablos.
Termina el concierto, en la apoteósis de la fusión efímera. Dalí trata a Velazquez con desdén y dibuja sobre las meninas dos rosados pechos de vírgen llamada Gala. Dalí ha renacido para ser cúbico, y ambigüo, como lo son los delfines que ahora saltan en medio de la impaciencia. Hasta donde hemos llegado, la gran Madre Selva gira en una danza embriagadora, llamando por su nombre a cada ser nacido de su vientre.
¡Hola! Hoy os aporto algo así como…
En especial para todos y muy especialmente para Diesel y el resto:
DEFINICIONES SOBRE EL TÉRMINO MATRIMONIO
(Todas ellas descubiertas en el libro del siglo XVI del muy Sabio y Renombrado Don Nicanor Tamborales y Díez de la Rivera)
Matrimonio: dícese de la situación que se plantea cuando dos personas, que no bestias de carga, deciden acortar su espacio y compartir baldosa.
Matrimonio religioso: acto, que además de costoso en haberes y estipendios, promueve el que a posteriori uno deba llevar testigos, madrina y padrino, peineta en su caso, o corbata y chaqué en el otro.
Del largo de la cola de la novia casi todos podrás adivinar el estado contable del marido. Esto no va para las princesas del futuro.
Porque sé que estás ahí
Esa tarde se había quedado solo. Ordenó sus libros y se sentó sobre la cama. Estaba cansado, porque todo le resultaba infinitamente agotador. Sentía el silencio de la tarde, el murmullo de las obras en calle, el calor pegajoso de un verano intenso. Se fijó en el suelo. Descubrió una pegatina que había perdido el día anterior. Su brillante plateado llego hasta sus ojos y pareció penetrar en su mente. Era un regalo de alguien desconocido. Era unamuestra de interés de alguien que le había ofrecido su amistad. No quiso seguir pensando. Dejó la pegatina a un lado y se puso de pie. Se acercó a la ventana y la cerró. Bajó la persiana y dejó que la tarde se convirtiera en noche artificial, en oscuridad protectora. En esa atmósfera, simplemente se dejó llevar por la respiración lenta y sosegada. Estaba solo.
Sueño que sueño desnudo…
Sueño que sueño desnudo
de palabras, de ideas, de pensamientos…
que mi sueño es tan profundo
que no tiene impedimentos
para ser el caminar trotamundos
de los mil y un alientos.
Sueño que sueño desnudo
de signos, esquemas, propuestos
organigramas del mundo
anquilosado en los muertos.
Sueño que sueño desnudo
de caminos y de puertos.