Érase una vez una soledad tan grande que se convirtió en noche. Y entonces fue cuando nació la luna…
Alba se encontraba en el mismo lindero en que había convivido toda su vida con la sensación de ser la primera causa de su propio drama. ¿Y la careta de las alegrías?. ¿Dónde estaba su famosa careta de la felicidad?. Alba no sabía responderse a sí misma cuál era la ansiada meta de sus perspectivas. Sentía el amor ausente. Y entonces nació la luna…
El transcurso de los momentos de su soledad la iba dejando a un lado de la existencia. Alba veía cómo se diluía entre las sábanas del silencio. Y entonces fue cuando nació la luna…Sigue Leyendo...
A medida que crecemos en edad vamos siendo sospechosos de todo y la verdad es que nadie entiende de qué somos sospechosos. Extraña paradoja pero real como la vida misma. Y entonces escribimos para aprender que la vida es una ocupación y cuando ella se dedica a no querer… de nada nos vale la experiencia para cambiar su antojo. Ponerse a escribir es por tanto algo que no nos sirve de mucho. Lo importante no es ponerse a escribir premeditadamente buscando un interés, sino simplemente escribir cuando entra el deseo de hacerlo. No para explicar esos momentos en que la vida se vuelve caprichosamente inconforme con nuestros anhelos sino escribir para sentirnos vivos. Sigue Leyendo...
Los múltiples seres del idioma como primeros atisbos de paráfrasis heroicas; caracteres y ambientes de literarias presencias; comienzos de una nueva comedia humana con las voces de los eternos mitos de la comunicación en forma de evasión hacia el horizonte… eres tú, Vorem introductorio, un espejo de escritura emuladora de las anónimas escenografías del sentimiento, de la duda, de la angustia, del placer, de la alusión realista o imaginaria del teatro universal que se llama vida.
Eres tú, Vorem mitógrafo, ensayo de lo no olvidado, explosión de voz procedente de las tierras originarias de lo humano: la literatura como epopeya de energía, de esencia en la conciencia de los robinsonismos, de las alegrías, de los dolores, de los penares, de las fantasías, de las realizaciones y las frustraciones, de la fabulosa locura de los viajes internos, de los filósofos no nomenclaturizados, no encubiertos, siempre en las génesis textuales. Sigue Leyendo...
Tienes sueño, ganas de evocar un nuevo camino… ganas de dormir en el espacio de lo invisible. Amigo, grekosay, eres para el Vorem una profunda encrucijada y el Vorem es tu amplia pradera-patria incluso para el deseo de dormir… !Un abrazo profundo, emotivo, silente y tan productivo como han sido tus grandes y personales textos vorémicos!. !Que despiertes muy pronto grekosay!. !Que la próxima jornada sea ahora mismo, en este lugar, en este instante!. !Y que siempre estés aquí, con nosotros, practicando esta mágica sorpresa de sentir la vida latiendo en toda la inmensidad de tus pensamientos!. !Te extraño, compañero, como se extraña al mar cuando se tienen deseos de embarque!. !!Vuelve pronto, grekosay!!. Amigo del alma, amigo… Sigue Leyendo...
La maravillosa más bella palabra tardaba en surgir. En un guión de sorprendentes propuestas alimentadas por el entusiasmo, una tras otra, se agolpaban con jolgorio en el pórtico de la memoria con sus brillantes presentaciones dirigidas a la inefable apuesta sensorial de ocupar lo más alto del escalafón dialéctico; pero ninguna de ellas obtenía el galardón definitivo. Entrenadas para una larga duración en el sentimiento, me llegaban de súbito retorno, como oleajes de sinfónica consistencia. Todas ellas silbaban su sonora canción en el repaso resumido de los duelos interpretativos…Sigue Leyendo...
Cuando miramos el mundo con los ojos internos de la introspección es cuando la persona se encuentra más cerca de alcanzar la sabiduría transmitida a través del equilibrio de los pensamientos, porque dejamos de pensar en los intereses de las apariencias y penetramos en la verdadera y honda condición de la vida humana. Para ello es necesario el equilibrio entre nosotros y todo lo demás: la contemporización de ver lo que hay de valioso en cada humano y ofrecerse las oportunidades necesarias para empatizar con las verdades no prejuiciosas y las realidades exentas de análisis condicionantes previos. Es importante aprender a vivir los propósitos del conocimiento desligado de cualquier tensión o pasión discordante. Cuando somos un “cuadro en blanco” es cuando podemos interpretar la trascendencia de nuestra personalidad propia tamizada por los contrastes con todo lo externo a nosotros. Sigue Leyendo...
Cinco minutos antes de morir somos existencia; diez minutos después de la muerte dejamos de serlo… pero esos quince minutos forman parte trascendental en la Historia Humana de personas que viven, personas que nos conocieron y personas en las que dejamos profundas huellas con nuestro existir. Quizás eso sea la Eternidad.
Lo ha dejado escrito Benzamín Prado en el diario El País del 28 de este mes de junio: “El fútbol es como todo lo demás, y por lo tanto hay dentro de él un millón de aspirantes a genio a los que para ser Picasso les falta audacia y para ser Van Gogh les sobra una oreja”. Pero casi nunca los verdaderos sabios buscan ser genios de la sombra ajena…
En este mundo donde el resultado suele ser más importante que el talento, el beneficio que se obtiene de las cosas está muy por encima de su verdadero valor0y la fama de una persona casi nunca está de acuerdo con sus cualidades, es enormemente satisfactorio poder sentirse auténtico, ~o ser imitación de nadie y, como principio de sabiduría, convertirse en diferente de todo lo de}ás pero entrañable unión con el0resto. Sigue Leyendo...
Ella se paró ante mis ojos
cantándome la vida adolescente
y vue mensaje entre la gente
con sabor a boca con sonrojos.
Ambos fuímos pétalos rojos
dejándonos |a prisa incandescente
y |a mirada cruzamos en la ascendente
noción de ser libres sin cerrojos
Sus0ojos me hablaron de sonrisas
y los míos de líricas premisas
en medio del alma y de la mente.
Y fuímos capaces de decirnos
que amábamos la vida de los mirlos
hasta incluso rebasar la muerte.
Este pasado día 23 de junio marchamos a la montaña un grupo de amistades. Liliana cumple años en la madrugada del día 24, justo en el día de San Juan, el de las famosas hogueras y decidimos irnos todos juntos a Alicante, a la cumbre del Monte Benacantil para abrir la mente y el espíritu, dejar de ser racionales por un día y hundirnos profundamente en el misterio de las imaginaciones. Nada mejor que senderear entre las sombras cobijantes del fuego del sol, entre las flores, y acompañados por la guía de los vencejos pálidos. Después de pasar allí el día, junto al castillo medievalista de Santa Bárbara, divisando toda la ciudad de Alicante y su armoniosa línea costera, hemos bajado, al anochecer, a la Playa del Postiguet, a celebrar el solsticio de verano (que es la noche más corta del año), saltando las famosas hogueras de San Juan… Sigue Leyendo...
Está en tí la esencia de tu persona. Está en tu mirar las cosas más allá de los externo, en lo profundo, en lo íntimo de cada uno de los destellos que sacan a relucir tus pensamientos cuando contemplas la vida. ¿Qué es la vida sino una concatenación de sentires tamizados por el pensamiento perpendicular de tus ideas?. Cuando sientes, cuando sufres, cuando gozas… cuando te quedas contemplando la vida que vives en plena dimensión y sacas conclusiones positivas para tu forma de ser es cuando de verdad existes. Y es eso, la existencia íntima de tu persona, la que que da siempre valor para sentir la felicidad y la tristeza, el ánimo y el desánimo, y las ganas de seguir adelante… Está en ti la esencia de tu persona. Y está en tu interior la verdad de lo propio que es, en definitiva, lo que realmente asumimos en este nuestro vaminar terráqueo. Despues… después queda sólo el misterio de haber comprendido lo que es tu vida proyectada hacia el más allá de tu propia presencia.Sigue Leyendo...
Sintió el íntimo suspiro de la tarde
y con un leve alarde
cual trovero de la siesta y de la lluvia
hizo un balance
de su lánguida condición…
trotaba el aire
sobre la umbría
del pabellón.
Por allí subía
el viejo del acordeón
que tensaba los acordes
de su rústica canción…
la música que oía
era para él diapasón
de los monocordes
diálogos del canguilón.
Pronto, muy pronto, antes de que Venancio termine de fumarse el cigarrillo del que expela volutas de humo en forma de hermosos círculos blancos azulados, como de gelatina transparente, caerá la tarde en El Terminillo, al otro lado de la arboleda; allí donde las grajas acomodan sus nidos y los rayos del sol llegan hasta el jardín donde crecen las altas matas de las adelfas. Cada destello luminoso de ese sol, que se está ahora escondiendo lentamente en el horizonte, parece un camino rosa claro en el que danza caprichosamente el polvo como un duende sin aliento…Sigue Leyendo...
No sé si será verdad… pero puede ser cierto que para vivir la libertad es necesario sentirla. Y para sentirla aconsejan los más conocedores de ella -aquellos que vivieron junto al viento- que lo principal es “dejar hacer”. Hay mucho de azar en eso de dejar hacer que la libertad nos guíe por el camino de la vida. Hay también mucho de dominio propio para dirigir los pasos hacia un lugar, un tiempo y un espacio que no estén predeterminados de antemano. Y yo pienso que para ser libre siempre hay que estar descubriéndonos la otra mitad; aquella mitad de nuestra persona que queda en el interior de nuestras sensaciones después de haber tenido una experiencia fundamental. Me he sentido libre cuando he necesitado tres cuartas partes de mi existencia para poder decirlo. Tres cuartas partes de cualquier edad y de cualquier sentimiento. Pero tres cuartas partes de un todo donde el resto ha sido la especificación de dicha libertdad. En definitiva, se es libre cuando se llega a la raíz de una situación tan autosuficiente que a partir de ahí todo es vuelo…Sigue Leyendo...
En el epicentro de las tertulias de sobremesa del día de hoy, una vez más a lo largo de toda la semana, un gran escándalo se ha incubado entre el vecindario por las aviesas sinrazones de quien, considerado amigo, traiciona a Shadia, la vecina del piso de arriba, la que vive en la buhardilla, cuya identidad todos desconocen pero que ha decidido poner a disposición de todos su naturaleza de mujer. No. No es lo que se puede imaginar. No es lo que parece. Pero desde que sabemos que su cuerpo huele a nubes de jazmín, hay sentimientos encontrados. Sigue Leyendo...
Se duerme el mar… se duerme mecido por los arrullosos vientos de Neptuno rodeado de miles de ninfas saladas, sílfides silentes, sirenas de amor… y en medio de la eternidad de su reposo, Manolo Cifuentes eleva su mirada imitando a lord Byron, a Walter Scott, a Víctor Hugo, a una multitud de poetas que se dedican, en el interior de su memoria acuosa y escondida, a evocar un pasado rebosado de nostalgias. Está tratando, en su costa dorada, de realizar un ejercicio de evasión para escapar de la realidad yendo contra corriente, contra la plataforma de ese patetismo resignado contra el que se rebelan los viejos paladines de la libertad ante la mediocridad ambiente. Manolo Cifuentes tiene tendencias a huir de las dulzonas inconclusiones de lo cómodo y busca el esfuerzo creador de su temperamento. Sigue Leyendo...
Como infinitos ríos todos discurrimos por las tierras humanas formadas por nuestra propia piel. Somos algo así como un solo corazón henchido de miles de millones de diafragmas en forma de hendiduras por donde circulan las ideas configurando sangrantes sinfonías de vivencias múltiples. Y a esas sangrantes sinfonías las podríamos denominar como el cuerpo/corpus de nuestra presencia en este discurso dialéctico que es la suma de todos nuestros “yos” y todos nuestros “porqués”. Arribamos a las estaciones diarias cuando los soles amanecen y después de vivir una intensidad de emociones expuestas en las horas del desaire de los sentires firmamos la tregua del sueño para descansarnos de la fatigante tarea que es sentir el peso de toda la existencia humana en cada uno de nosotros y de alguna manera más o menos total. Sigue Leyendo...
La sonrisa nubla a la tristeza cuando hablamos de recuerdos. No importa tanto la edad ni el sexo, sino saber que nuestro rostro se hace expresivo e incapaz de disimulos cuando nos enfrentamos a escribir en nuestro diario con la nostalgia del día colgando latentemente en nuestras cotidianas historias. Hay siempre un prometedor mañana que llevamos dentro de este cuaderno que llamamos diario y que es siempre nuestro mejor libro de cabecera a la hora del anochecer, porque narra nuestros crecimientos y nuestros desmorones a la hora de transcribir a las palabras todos nuestros sentimientos mezclados. Hay mucha alegría y mucho dolor en un diario. Hay mucha ternura y mucha rabia en un diario. Hay mucha vida en un diario…Sigue Leyendo...
Entro, como todas las noches, en el Lyon y me siento en mi lugar preferido. Allí está, como siempre, ella. Sentada cuatro mesas más allá, en la fila de enfrente. No es guapa. Tampoco es fea. No es atractiva. Tampoco es desagradable. Es glauca. Es transparente. Es enigmática. Es atrapadora. Sorprende sobremanera su forma de mirar hacia ninguna parte. Sorprende la pirámide invertida que tiene grabada en la frente. Sorprende su sonrisa mientras mueve el azúcar del café…
Hemos nacido tú y yo para el crepúsculo
de la tarde uniéndonos las manos
mientras el azul nocturno nos emborracha
de estrellas ponientes llenas de palabras.
¿Qué dirán las ajardinadas estatuas del parterre
cuando dejemos las huellas de nuestras bocas
en el andén de este crepúsculo de soles?.
Mientras descifro cuál será la vida
siempre te recordaré asomada al galope
de este crepúsculo que me cegó de amor
y alguien me encontrará mañana
todavía tratando de encontrarte
en el recóndito concierto de las manos.
Me adentro en la espesura del deseo
cuando la fulgurante llama de lo intenso
busca un verso denso de ternura
con el que hacer un poco de lo inmenso
en el loco ejercicio de la Nada.
Para sentirte… sentirte acompañada
por lo etéreo, lo confuso, lo perverso
de esta silenciosa voz callada.
Y que el verbo se empape de premura
en el fondo callado de la almohada.
Mientras el abuelo retoca con barniz la madera del armazón de la última de sus afamadas guitarras, ella permanece silenciosa, sentada en la banqueta, a la puerta del taller de los Tiradores Altos, dando punteadas a la tela blanca donde pespuntea dibujos de verdes hojas de acanto adornando los ribetes de rojos claveles. La abuela Rufina no sabe leer ni escribir, pero entiende a la perfección el lenguaje de los colores y las cosas y por eso, mientras escucha por lo bajito, muy por lo bajito, la radionovela de turno, musita en su interior las canciones que en su juventud él, Bonifacio, le dedicaba en sus nocturnas serenatas, acompañado de su guitarrón, a la puerta del molino, junto al cuerpo de piedra de la fuente de los dos caños, vigilados por el Benito que los observa con el comezón de los envidiosos celos recomiéndole el corazón.Sigue Leyendo...
Detrás de cada latido mensajero
el pecho palpitante descubre sus misterios
y la luz circunda los epistolarios
con presencia de axiomas personales.
Lo sumergido en el alma del espacio
es la voz invocando a las ideas.
No soy mis ojos ni mis labios,
sino el rostro bisectriz de una despedida
colgada en la baranda de los silencios
hasta que tú te atrevas a desentrañarlo.
Hola Carolina. Muchas gracias por tu interés en el tema de Rilke a quien yo considero uno de los mejores poetas del XX. Estoy seguro de que las anotaciones expositivas que te hará Grekosay serán de extraordinario valor. Yo, por mi parte, y dando paso a cualquier otro voremio o voremia que quiera corregir, aumentar o debatir mis opiniones voy a intentar contestar a tus interrogantes planteada con lo mejor que yo pueda hacerlo. Por supuesto que habrá muchos otros enfoques igual de válidos si es que los míos lo son (cosa que es por supuesto subjetiva). A tus cinco preguntas yo las respondería así:Sigue Leyendo...
¿Habéis visto la lluvia?. Esta lluvia de madrugada que ha colgado sus lágrimas en el perchero gris de la sombra de los juncos. ¿No la habéis visto?. ¿Pero si está cuajada en las horas de vuestros párpados sedientos?. ¡Es imposible que no la hayáis visto!. Ha llegado así, de repente, con la tristeza del niño acurrucado bajo el mantón de la abuela. Ha sido una lluvia de pequeños llantos colgados, como la rama del almendro que está ahora sollozando por la larga espera. ¿De verdad que no la habéis visto?. Ha sido una lluvia de mandrágoras saladas surgiendo de un vaporoso lagar de mares en tinieblas. Sigue Leyendo...
NIÑA.- ¿Qué me traes hoy, verde esperanza?.
DUENDE.- Una bella canción en forma de estrella.
NIÑA.- Quiero que sea una estrella alegre.
DUENDE.- Tan alegre como tú.
NIÑA.- Una de esas que corren por el cielo.
DUENDE.- Así será, pequeña sonrisa. Una canción fugaz de primavera.
NIÑA.- Duende… ¿Es la primavera la estación de los sueños?.
DUENDE.- Para ti sí, mi amor pequeño.
NIÑA.- ¿Y para ti?.
DUENDE.- Para mí sirve cualquier momento.
NIÑA.- ¿Qué es cualquier momento?.
DUENDE.- El instante en que tú deslizas tu presencia por el tobogán de mis emociones…Sigue Leyendo...
¿Quién atenúa tu fuerza antigua, tu vida, tu contenido?. ¿Quién te traiciona hasta el extremo de despojarte del combatir continuo al lado de tus definiciones propias?. !Surge!. !Levántate de nuevo!. !Haz que tu corazón se tranforme en fuego!. No vale cosa alguna vivir en el fango de la mezquindad. No te hagas daño. !Aumenta tu caudal de vida y lanza tus impulsos hacia la ilusión de tus búsquedas!. Que nadie, absolutamente nadie, te deje en la postración de la amargura. Que el vibrante resonar de tus convicciones te sigan convirtiendo, día tras día, en una aspiración hacia lo profundo de tu ser. Y que tus ideas sinceras maduren en el módulo de tus alternativas. Que alegría e inspiración sean siempre expresiones de tu indómito deseo y tu voluntad. Sigue Leyendo...
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