Nada sé de ti que otros no hayan dicho. Quienes callan tu verdad han sabido erigirte como centro de la urbe, como columna vertebral donde las verdades son únicas y un solo dios lleva luenga barba. Desde que vi tu imagen, disminuída por la ebriedad de una tarde, susuré silencios para el nuevo Rey de una Cristiandad desordenada. Desde tu quietud pasmosa, desde la calidad de tus neuronas colosales, ha llegado el triunfo de la razón, de un descartiano afirmar que sólo es lo que en relealidad es; lo demás pertenece a la contumaz degeneración de la distancia. Y porque no siendo “tu hijo” debo ser miembro de la comunidad global de este mundo, miro tu caminar pausado, la lentutud de tus gestos, los soslayos de tus miradas y ese no-saber-nada de lo que en tu corazón refugiado en la consonancia de tus Mozart, dejarás entrever por los siglos de los siglos.
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Ausente la palabra y el corazón abierto
Dame palabras, como si derramaras sobre mí
el ansia de un saber secreto, la lujuria del sentir,
la esencia del sentido.
Sonoridades abiertas a la excelencia de la tarde
y éfímeros cantos.
El sol se alza sobre su pedestal romano y se proclama dios.
Nada se ausentará de tan intenso instante;
nadie abominará de su razón humana,
y el caminante se detendrá en la bodas del eterno ciclo.
Desde la tormenta
Te doy las gracias Diesel por tu sentido comentario. La verdad es que nunca he dejado de seguir la página, simplemente…he prmanecido de tormenta en tormenta, en ese devinir hacia la vida coherente y escribir…me costaba un verdadero esfuerzo. Ahora siento calma; o al menos la tranquilidad suficiente para no sentir los grandes avatares de una historia que prescinde de lohumnao y lo divino, porque está escrita por aquellos que han decido qué hemos de ser.
Me ha gustado observar la inmensa ibertad y la poesía en cascada de la que la página rebosa. ¡Salud mental y sensibilidad comunicativa!.
Se me ocurre una hermosa frase que jamás nadie dijo, porque en realidad las mejores palabras son los silencios.
“Todo amanecer es la renovocación de cada momento de la humanidad”.
Una vez más, gracias…He vuelto y me siento bien, como si al reencontrarme con la casa abierta y los amplios espacios de libertad, todo fuera un nuevo amanecer.
Ese día lloré.
Ese día lloré porque nada justificaba que me sintiera poesía por una tristeza primaveral. Fue bueno comprobar que otras muchas lágrimas anónimas se unieron a las mias formando un colectivo de húmeda sinceridad. La vivencia sigue aún dentro de mí, porque a pesar de todo y todos…los grandes sueños se derrumban bajo el peso del principo de realidad. Es verdad que “nos queda la palabra”. Es verdad que somos parte de un inmenso plan de un Dios silencio que navega en la incertidumbre. Es verdad que todo cambio es una proposición honesta para la humanidad, pero quizá…desmesurada para las almas sensibles. Y en mitad de esta reflexión…profundizar en los porqués de ese día no me conducen a nada. La gloria, que tanto ha hecho del hombre un lobo entre lobos, alcanza hasta las cabezas coronadas. Que sea para bien…que sea por verdad…que sea de verdad, porque todos llegaremos al mismo punto final, donde nadie sabe decir otra cosa que nada.
Alguien voló sobre el nido…
¡Amanece…que no es poco! La Tristeza va dejando de ser un sentimiento con peso, con valor. Hay demasiado mundo que se desintegra y otro, que habita los abismos de una pertinaz tendencia a la incoherencia, que muchos sólo sabemos sentarnos y aprender a ver la vida desde la inmensa globalidad que es la existencia.
Suave como la luz
Sísifo en su vértice extremo
Sísifo carga con su pesada piedra mientras modela el camino por donde pasa. Un incensante juego de carga y descarga convierte este mito en la clave para entender el dolor humano, la bárbara actitud de la constancia frente a la necesidad de una clara apertura al mundo. Sísifo camina errante por nuestras montañas, por los valles, por el paisaje vasco presintiendo que su pesada deberá seguir en estos lares su vertiginosa constancia. Planes para demostrar la voluntad de unos frente a otros. Supuestas convenciones y pactos. La inmensidad de una roca que nunca alzarán las palabras coherentes, sino los actos coherentes, la verdad convertida en justo derecho de todos a todo.
Luces lujuriosas
Perdemos humanidad en la medida en que nos convertimos en escaparates del consumo. Nadie puede argumentar la lógica que nos obligue a ser devoradores de un todo: sea lo que sea. Esta vez nos ha ganado la batalla la gran influencia que tiene la Tradición. Es de rigor pasar una noche en casa, creando hogar, a la luz de un fuego que no se apaga. Y cuando han sucedido atrocidades inmensas, macres desmedidas y desmesudas faltas de conciencia…siempre habrá Navidad.
¡Es una batalla que “algunos” han ganado para siempre”.
Ulises y el Caballo de Troya
Nos han colocado un Caballo de Troya en medio de esta España Invertebrada. En su enorme panza han escondido las verdades, la sinceridad, la proeza de manifestar lo que no se sabe, la sensatez del justo…y todo en honor a un dios llamado Orgullo. Es insensato asistir al circo de las vanides políticas para saborear el fracaso como obcecación. Es fraudulento deshacerse de todo hecho justo para favorecer el encubrimiento y la mentira. La lucha contra el Terror también debe hacerse contra quienes pudiendo haber sido nobles y sencillos fueron la ignorancia de los guerreros que asaltaron y destruyeron Troya. No fue suficiente el dolor de tantos para saciar las ansias de protagonismo de un ejército de burócratas practicantes de una fe, en la que no cabe un solo dios, sino el Egoísmo. Los capítulos de la historia de nuestro País caen a pedazos y el señor Aznar se acerca, a pasos agigantados, hacia el noble oficio de persistir en la certeza de una teoría donde nadia sabe, donde nadie responde, donde todos somos presas fáciles de su Ignorancia.
Entre tus palabras
Vivencia
Descubrí la web de Vorem en uno de los suplementos del periódico el País (cyberpaís). Gracias a mi desarrollado sentido de la curiosidad me puse en contacto. ¡Qué fácil resultó poder entrar en este juego virtual!
en esto de la inmensa galaxia de páginas en Internet, supuse que sólo sería un viajero de paso…pero la rueda de la fortuna me colocó en el lugar adecuado y en el momento justo. Desde lo que he podido escribir siempre he tratado de autentificar mis pensamientos, mis reflexciones y esos toques íntimos que la poesía nos permite. Después de un pequeño alejamiento…porque sólo lo que se echa de menos parece tener un valor especial, regresé…y espero poder apagar la vela de esa tarta de millones de palabras con la que desearía celebrar el primer aniversario del descubrimiento de un Nuevo Mundo.
¡Un año!
Villancico
Dice el villancico popular: “pero mira como beben los peces en el río..” Es extraordinario el hecho de que un pez no se ahogue. Y de este supuesto koan japonés salto a uno de los grandes dilemas de la historia…si llegamos a alcanzar el don de la palabra ¿por qué la destrozamos como si su valor no existiera? El río del hablar, del decir, del comentar, de dar cuentas…parece sumir a los peces en un inmenso y protector chaleco salvavidas. acabo de apagar el televisor ante la inmensa y portentosa utilización de la palabra en beneficío de un inmenso “besugo”. ¡Él!
¡Día de acción de gracias!
Y se me ocurre, así, como de repente…que los niveles de diplomacia política pueden alcanzar cotas inimaginables. No suelo tener un deseo de “venganza/rechazo…de intensidad peligrosa”, pero ese glamour de comer y degustar un “inmenso pavo” en compañía de la aristocracia más preclara del sur de Europa, es algo que al Semidiós Bush le ha puesto los dientes largos. Un pavo regio. Un pavo del que se guardarán los huesecillos a manera de “reliquias de una visita inolvidable”. Y está claro, nada es imposible, y cuando en mitad del mundo se teme el juego americano, se aprecian los gestos constructivos y las buenas maneras de servir a causas “divinas” y “humanas”. Si estaba prevista la visita Real al Cielo Americano…no ha dejado de cautivar el inconsciente colectivo que conecta con las bondadades y los reconocimientos.
¡Todo sea porque dado el momento, la Zarzuela no sirva para decorar los nuevos intentos de colonialismo americano, y además…porque la devaluación de todo lo “regio” comienza a ser moneda de cambio.
¡Siempre creeré en los Reyes Magos, en los de verdad, en los del Oriente, en los que no se ven…pero que están ahí, en mitad de la noche, entre la desesperanza y el milagro de la ilusión!
“Algo bulle en el ambiente”
No cabe duda de que hemos convertido la existencia en un proceso circular, periódico…casi “tópico”. ¿Qué nos toca vivir en esta etapa? No diré la palabra, porque prefiero jugar a imaginar “mundos sutiles”. Por curiosidad me salté una parte del círculo y pude ver el DVD de la película la “Passión”. ¿Qué es lo que no supe ver? ¿Quizá todo aquello equivalía a la puesta en escena de una tragedia irrespirable? Con sinceridad…no pude llegar ni a la parte donde “Jesús es prendido”. ¡Es increible, pero el círculo de la existencia nos coloca ante ideologias, pensamientos y otras virguerías mentales que…! Imagino que lo más hermoso es poder sentir el frescor del aire, y sentir un sol limpio, lejano, distante, pero con esa presencia circular que lo mismo se vuelve insaciable, que nos hace añorar su presencia.
Venganza: ojo por ojo
Y así se está desarrollando. Las promesas del Dios Americano, del impasible y bíblico vidente de deidades se cumplen inexorablemente. Las bombas son ejemplos notorios de su verdad. Los cadáveres, listas de trofeos. Los llantos…un nuevo río que llevará su nombre. La Comunidad HUmana asiste a un Doloroso espectáculo, donde nada parece poder hacerse. Caeran las casas, se derramará hasta la última gota de vida. Las antiguas oraciones serán prohibidas, porque Cocacola, escrito en árabe, puede equivaler a una consigna sagrada.
Ojo por Ojo…jamás nadie escribió tan dolorosa venganza. Quienes lo transmitieron…no hicieron, sino alimentar el espacio de una libertad sin nombre que todos conocemos, pero que somos incapaces de contemplar impasibles.
Sobre las Palabras
La vida ha ído pasando rozando mis sentimientos, llenándome de sueños que aspiraban a palpar un cuerpo o sentir el cálido beso cerrando los ojos. Todo transcurriía en ese juego de realidades, o mejor…de irrealidades, donde la verdad no se hacía presente y la mirada se detenía precipitada sobre cualquier rostro.
Necesidad de Vida
Necesidad de Alma
Cuento de Terror
No sabía qué hacer. El semáforo señalaba parpadeante la luz roja y los coches bajo la lluvia bramaban. ¿Cruzar? En este desesperada duda se me cayó el pañuelo a la acera. Me agaché a recogerlo. Rocé con mi cabeza el bolso de una señora. La señora me miró creyendo que trataba de robarle el bolso. ¡Un grito en el semáforo! Un bolso en mi cabeza, las gafas rodando. ¿Cruzar? La intensidad del momento me hizo dudar. Me levanté y miré a la señora dándole un empujón…¡Cayó sobre el asfalto! ¿Cayó sobre el pañuelo? ¡Todo el horror de una tarde de lluvia ensordecida por las bocinas de los coches! ¡Asesino! ¡Asesino! Un inmenso colapso mental se apoderó de mí. Retrocedí hasta el Cajero Automático y saqué unos euros…euros…euros…
Ciertos padres…
Me siento cansado. Nadie me dijo, y no lo llegué a sospechar, que la vida se llenara de sinuosos cambios. Hoy ha sido un día agotador. Los padres, reunidos…se sentían en mitad de una asamblea de semblantes, de rostros que se huían, de miradas aconsejadas por la prisa. ¿Qué hacemos por nuestros hijos? No he querido contestar. Se habló de los profesores, se increparon sus actitudes, se juzgó desde la ignorancia.
La noche llena de humedad favorece un sentimiento de oscura somnolencia. Dormir…soñar, tal vez… Ciertos padres son el escaparate, la nube, la neblina, el semblante, la mudez, la inquietante desesperación de un no saber qué hacer. Y desde mi mesa, desde el encerado…sus hijos rien en mitad de libros, de tareas inconclusas, ágiles para saltar a la calle, hábiles para mentir por decreto ley. Ciertos padres…se han alejado hacia su soledad. Desconozco parte del todo, pero en lo que a mí me corresponde…desconozco el verdadero volumen de un Iceberg flotando en medio de la sociedad. Buenas noches; al menos…éstas.
¡Justicia!
En último término la balanza de la Justicia termina por dar la razón, o negarla, a una multitud de seres hambrientos de ser nadie. Asistimos al acto de una hoguera de vanidades, donde todos formamos parte de algún personaje del guión social. Los profesores de Instituto se sienten, ante la aplicación de la justa medida de sus obligaciones, con temor, con miedo…La adolescencia, o la pubertad acrecentada, suscita el inquietante espectáculo de una Justicia aplicada según sus cánones. En esa etapa de la vida, donde todo intento de pelear es válido por alcanzar el ser, se expand por caminos y sendas sinuosas. Todo vale, pero nada importa. el adulto, que educa, que debe educar…que es un valioso referente para establecer una conexión con la sabiduría, declina, como el árbol en otoño.
Habrá de crearse nuevos términos de Justicia. Habrá de inventarse la justa medida.
El Dios de lluvia llora sobre América
Árboles en flor, continente de nubes,
espacio, donde la libertad se pierde, se evapora.
Voces que reclaman desde púlpitos altivos,
generaciones de látigo y de guerra.
Un Cristo inventado para su gusto y medida,
una Biblia desgajada en capítulos irreales.
Libertades perdidas tras la necedad de un hombre,
o mil hombres, o mil razas.
Sobre las cosas pequeñas
Es época donde poder escuchar el silencio de los musgos. Los frutos rojos, los bosques descarnándose, los cambios tonales de un paisaje que todo lo alimenta. Flores que soportan el frío. Piedras húmedas. Murmullos de castañares dejando caer sus frutos sobre la hierba. La ciudad se adapta a un ritmo casi lento. Estos en medio de una filosofía de lo sencillo, de lo simple de la audacia por asumir que todo forma parte de la voluntad de lo indefinible.
¡Porque me da la gana!
Esta expresión es capaz de desencadenar toda la ira, todo el odio, y todo el desprecio más humano…en forma de pelea. Una gran parte de lo humano que todos somos no tomamos conciencia de la necesidad de sentir que el mundo es un todo global. Ayer. Un bocadillo en la papelera de clase. Lo recojo y se lo entrego a su dueño. ¿Por qué lo has tirado?
¡Porque me da la gana! Y el mundo gira alrededor del efecto mariposa:
no meda la gana de comer, no meda la gana de respetar los derechos humanos, no me da la gana de ser coherente y justo con lo que soy.
Desde el bocadillo en la papelera…hasta llegar a ser Presidente de un País extremadamente Conservador, solemente se cruza una liger línea.
¿Dónde está la humanidad?
No quisiera caer en el catastrofismo al que nos van acostumbrando con películas, novelas y Leonardos metidos a Templario de pro. Nuestra época se va llenando de paradigmas vacíos de contenido. Un humanismo encubierto que eleva el progreso del ser hacia una dimensión de acontecimientos, sin más. Se lee muy poco. Se habla mucho. Se combate en todos los frentes de esta guerra mundial tapada por los memntideros políticos. ¿Dónde está la humanidad?
Nos acostumbraremos a la dureza de quien sobrevive. No existe claridad en las voces de los grandes reencarnados. El silencio de qui8enes fueron premios nobeles de la Paz…equivale a su tarea callada, aún más callada, bajo el peso de la medalla. El compromiso de muchos…ese voluntariado en favor de la vida, y no de la muerte, debe contemplar con pánico, que los desastres vendrán de la mano de quien dice hablar por boca de Dios.
Nada avergüenza más a un dios qe un simple humano se atreva a hablar en su nombre, porque también los dioses son el EGOISMO (con mayúscula).
Se Indiferente
Don quijote
Alguien perpetró el terrible crimen de ocultar su cuerpo, de esconder su verdad, de hacer de él la más grande historia jamás contada. Y con esa valentía, que a todos nos da la vida, pretendemos reinventar la intensidad de un relato que culmina con la muerte callada y anónima…de todo un arquetipo. ¿Quién desea leer un capítulo de d.quijote? Y el silencio se convierte en ausencia de silencio. A casi nadie interesa y ese, casi nadie, es el inoportuno alumno, que desde el fondo, levanta el dedo confundiendo D.Quijote con los últimos dibujos animados manga. Todo un revelador mensaje de nuestro p´ropósito de vivir del pasado.
Historia de la Belleza
Se lo dijeron y adquirió el compromiso de alcanzar todas las reglas, todas las premisas. Significaba ser diferente, alcanzar la distancia entre los obejetos y ese algo señalado y diferente. Sobre sus manos, el libro lo describía todo. ¿Por qué no alcanzar la plenitud en la Belleza?. Regresó, una vez más, a la soledad de su espejo decorado, y mirándose descubrió que todo estaba allí reflejado, que sus rasgos se correspondian con los descritos, que su palidez incluía una cierta semejanza con lo inexistente.
Y fue así como encontró su sueño. Se adueñó de la posibilidad y alcanzó el todo, la plenitud.
El regreso
Ulises se me antoja el prototipo del hombre que regresa. No valoro su historia, sino el sentido responsable del regreso. Me ilusiona regresar. Despierta en mí ese deseo de reencuentro, de descubrir el amplio despliegue de tantos nuevos escritos, y la permanancia de un “espacio de libertad” que sigue siendo fiel a sus principios.