Todas las entradas de: Celeste

Mi punto débil

La ilusión puede transformarse, muchas veces, en el mayor punto débil de una persona. La ilusión, irrealidad atormentadora, sintetiza lo que se llama imaginación y estremecimiento. Recubre la simple realidad, objetiva y triste.
La ilusión impulsa a la persona a volar, a ascender; aunque siempre al tanto de una posible caída o derrota. Pero los caminos de ilusión suelen ser mas enérgicos y divertidos que los caminos de determinismo mundano (también llamados: realidad). Sucede quizá, que las formas estereotipadas carecen de ese movimiento ilimitado que invita a eso, a soñar. Sigue Leyendo...

Tus ojos de mentira

Alguien preguntó si tus ojos eran de verdad.
Si realmente veían la realidad, o si veían, en todo caso, lo oculto.
Pero tus ojos nada ven. Ni lo verdadero que se manifiesta, ni lo oculto que se insinúa.
Porque tus ojos son de mentira.
Son meros espejos, que nada captan.
Tus ojos son trozos de hielo, que ni siquiera se derriten cuando alguien intenta darte amor.
Tus ojos son dados que ruedan a tu suerte.
Son pequeñas escalas de misterio.

Catarsis

Corría el mes de julio, y se detuvo en aquel lluvioso domingo.
Mi mamá y yo estábamos sentadas en primera fila, aguardando el momento.
Poca gente ocupaba el teatro. Algunas señoras con sacos abrigados y sombreros elegantes.
A las siete de la tarde comenzaba la función.
Las luces, estratégicamente ubicadas, invadían el escenario, reflejando el claroscuro de un color parecido al rojo.
Mis ojos se estremecieron al ver -a quien representaba en la ficción- a aquella figura tan especial, hermana de un inexplicable sentimiento de admiración y dolor. Sigue Leyendo...

Llegó el amor

Ella levantó los brazos para que Nicolás pudiera quitarle la blusa que llevaba puesta. Se apresuró a cerrar los ojos, sintiendo, ahora solo con la piel, las manos ásperas y grandes de el, contrastando con su delicado contorno de princesa. Terminó de recorrerla entera, bajando y subiendo con sus manos y su rostro, besándose, hundiéndose, calcinándose en la tersura de aquella piel nueva, transparente y hermosa; hasta que cayeron desnudos al piso frío y opaco que espiaba ruidoso, enardeciendo las maderas quejumbrosas con el sonido del amor.
Ella reconoció la piel de su amigo, tibia y gruesa. Y se recorrieron juntos, cada centímetro cuadrado del cuerpo del otro, con besos, con roces, con rostros enarbolados por tanta felicidad. Sigue Leyendo...

La fiebre del vacío

No estaba mas arriba, ni mas abajo.
No tenía forma, no era palpable. No brillaba ni era opaco. Ni siquiera se veía. No era negro.
No pensaba, no sentía, no viajaba.
No era rey, no era dueño, no era joven ni era viejo.
No era el ruido ni el silencio, no era sombra, no era cara ni careta.
No era bueno, no era malo, no era inocente ni era culpable.
No era chico ni era grande.
No luchaba, no era héroe ni salvador.
No se medía, no se contaba, ni se sumaba, ni se restaba.
No jugaba.

En combate

Me encuentro en medio de la guerra.
Uno de los caballeros me mira de reojo, con temple desafiante.
Llega heroico hasta mi sitio con su impecable armadura; sangre de acero.
El campo de batalla resuena de atropellos y muertes prematuras. Dos cabezas ruedan frente mío con la ligereza de la luz, hasta desaparecer en la humedad del estrepitoso lecho.

El sol se hunde en los cuerpos inertes y aclara los rostros de
quienes combaten Aún.

Lenta lluvia de tristeza

Llovía,

lentas muy lentas las gotas de tiempo que recorrían la triste ciudad.
Oscuros peldaños separaban las memorias de quienes sobrevivían,
Llueve lento -alguien dijo- y los pájaros negros se sorprendieron de la discordia del día anterior, aquella disputa por migajas bajo el sol, hoy parecía un festín.
Solo algunas muertes esparcidas, un gusto amargo en la boca, en la garganta, en el cuerpo.
Llovían desilusiones, pérdidas, vidas arruinadas, conquistas y conquistados.

Llovía el mundo entero una lluvia negruzca y pegajosa,
dueña de mil males.
Y dos o tres transeúntes caminaban despacio con galera y bastón.
-Visitemos a los poetas!- gritó alguien que miraba siempre para atrás…
y el mundo entero visitó a los poetas, gran tertulia pincelada de introspecciones expuestas, esa tarde la ciudad estuvo de fiesta. Sigue Leyendo...

Mi velero azul (otro destino)

Hoy pensé que tenía un velero azul y recorría los mares en él. Todos los mares, siempre con la proximidad del agua y del cielo. Viajaba sin destino. Solo viajaba. No tengo respuesta si alguien me pregunta a dónde voy. Tan sólo porque no se a dónde llegaré. No lo soñé, lo pensé. Y aún sostengo esa idea. Veo al velero, hermoso, transparente, rozando las olas del mar. Siento mucha paz. Mucha. El aire es distinto, es perfecto. El sol está oculto pero aún entibia. Y mi velero viaja conmigo. Contándome un secreto. Hasta que se hace la noche y nos largamos juntos a llorar. Alguna pena guardada en mi memoria le cuento. Sigue Leyendo...

Mi Velero azul

Mi velero azul se confunde con el mar
se confunde con el viento en el intento de buscarte en el silencio

Mi velero azul, opaco azul
la luna lo mira allí bajo las estrellas

Es un velero distinto,
porque es mi velero azul
no es Francia no
es casi índigo

Tu cuerpo

Algo se cruzó por mi mente logrando apenas distraerme del recto perfil de tu mirada. Dos ojos pálidos se estremecieron en el contacto con el abismo que te obligó a doblarte en un solo movimiento mirando el piso.
El aire reseco de la habitación atestó a vaciarte, profundamente llano, intensamente solo.
Si mirabas hacia arriba, no había mas que un techo liso que te aislaba del mundo y te absorvía en tu propia conciencia.
Si te mirabas en tus ojos, reflejabas el olvido del silencio y la resignación. El paso cansado de un presente de rojizas intenciones. El tiempo estancado en la llama del dolor que todavía duele, que todavía quema. Sigue Leyendo...

Tropezones de oscuridad

Creo ya haber sentido la esperiencia anteriormente. Divisé los resabios de quien yo era cuando llegué a este lugar, o a este cuerpo sin límites. Nada pudo ser estático, nada quiso existir del todo y nada me devolvió lo que antes parecía pertenecerme.
Y allá -muy lejos- caminaba sola, evadiéndome de las mil lunas que me observaban tímidas, dueñas de un enorme mutismo.
No me escapaba de nadie, mas que de mi misma. No me alejaba de nada, porque lo poco que tenía estaba dentro mío, taladrándome las ideas que se convirtieron en sorpresas o en derrotas.
El pasado no encontró su lugar -¡cómo entenderlo!- el pasado no quiso ser hipócrita, el pasado tampoco quiso quererme ni que lo quisiera. Sigue Leyendo...

Contradicciones

Si pudiera expresar con palabras algo que ni siquiera yo entiendo, seguramente sería una especie de magia o sortilegio.
Cada día me convenzo más que la vida es una contradicción en si misma. Todo, absolutamente todo se contradice holgadamente en mí y en mi vida. Todos los efectos o consecuencias o finales o actitudes irrumpen en una fóbica contradicción.
Será porque no encajo adecuadamente en el vertiginoso puzzle de la vida. Será porque soñamos en soñarnos como nos vemos en nuestros sueños. Aunque intento ser un poquito mas feliz, o un poco menos infeliz cuando me envuelvo en lo exquisito de lo inexistente, cuando me abrazo a un sueño, o a una estrella, o cuando sigo perpetuando en mí la imagen de quien (ya) no existe.
Solo una contradicción puede escapar a un presente, tan sólo el esbozo de una ilusión desdeñada o lo latente del pasado que invierte el presente y disfraza el futuro de muñeca derrocada y me hace sentir: nada.
Lo irónico es que cada contradicción que existe en mi vida es creada nada menos que por mi, en algún remoto momento que la sentí como verídica, o posible.
Cada contradicción fue primero una hipótesis, fue luego un revés;
y mas tarde una confirmación del fracaso. Sigue Leyendo...

una sombra de tí

Seguí tus pasos y aprendí a sentir, aunque creía que ya no podría hacerlo, aprendí a aprenderte, aprendí a pensarte y a quererte, cuando antes solo escuchaba tu nombre, lejano. Seguí tus pasos y logré entrometerme en tu mundo, que es mas tuyo que lo mas íntimo, que ya es mío, y es mas hermoso que nosotros. Aprendí a escribir para dos, y a disfrutarlo; a sentir una intensidad mas profunda aún de aquella que parecía loca y arrebatada. Aprendí a enamorarme del amor mismo; a ver mucho mas allá de los ojos, aprendí a sentir traspasando la piel y las parcelas del cuerpo. Aprendí también, a quererte con miradas, a pensarte queriéndote, a quererte pensándote, a sentir un presente que borra pasados, y alienta futuros… Sigue Leyendo...

amor desamor

Cuando juré que no seguiría pensando en él, juré también que nunca podría mantener efectivo un juramento. Juré implícitamente que seguiría en mi oficio de eterna enamorada, que no hallaría ni en el reflejo del sol el calor que desprende mi mente cuando pienso en él. Juré que las horas seguirían siendo tiempo inválido, como si el tiempo se hubiese detenido, cortado, quebrado; los minutos y los segundos jugarían a ser fracciones insolentes de un tiempo sin tiempo.

Con la tristeza en mis manos.

Hoy escribo con la tristeza en mis manos, en mi cuerpo, en mi alma. Ese sueño perdido, oculto, intangible, tan difícil de concebir como de aceptar. La escandalosa bruma y al mismo tiempo la tenue perplejidad. como encontrar eso que nunca existió. Como recuperar lo que tu cuerpo ya arrastró y desechó rotundamente. Nunca sabemos si lo que hoy somos es la imagen de lo que otros fueron o de lo que quisimos ser…o de lo que imaginamos ser quizá…no sabemos si la imaginación existe o es el resultante de nuestra absoluta evasión. Mas que la evasión no es mas que un alejarse como dicen algunos, o un desconectarse… eso significa ser cobarde?. Por que querría la humanidad irse de este lugar. Que es lo que está pasando…las horas caen y el sentimiento se hace aún mas profundo..mas confuso…pero, por qué hablamos de confusión… Sigue Leyendo...

vallejianos…

Hoy me gusta la vida mucho menos…

Hoy me gusta la vida mucho menos,
pero siempre me gusta vivir: ya lo decía.
Casi toqué la parte de mi todo y me contuve
con un tiro en la lengua detrás de mi palabra.

Hoy me palpo el mentón en retirada
y en estos momentáneos pantalones yo me digo:
¡Tánta vida y jamás!
¡Tántos años y siempre mis semanas!…
Mis padres enterrados con su piedra
y su triste estirón que no ha acabado;
de cuerpo entero hermanos, mis hermanos,
y, en fin, mi sér parado y en chaleco.

Carpe diem III

“Dos días en la vida… cuando escuché esa frase pensé de inmediato –casi automáticamente- cuántas cosas puede hacer una persona en dos días /cuarenta y ocho horas. Y la respuesta que de mi fantasía emergió fue: mucho. En primer lugar y, justamente como más importante –las emociones o sentimientos- ¿qué quiero decir con esto? En dos días puedo enamorarme, puedo odiar, llorar, gritar, cantar… Entonces, conforme a mis emociones puedo hacer todo lo que hago diariamente en la módica suma de cuarenta y ocho horas. Y siguiendo con las conclusiones, hay gente que asegura que “la vida no le alcanza”, que “no tiene tiempo”; de ahí ¿qué significa no tener tiempo? Partamos de la base de que el tiempo siempre está, siempre estuvo y estará por y para siempre. Entonces el asunto no es ese, nuestra existencia representa tan sólo una milésima parte del universo que nos contiene, que nos circunda en tiempo y espacio. Pasamos por la vida como pequeñas ráfagas suicidas que no terminan de aparecer cuando ya perecen. Sigue Leyendo...

Carpe diem II

“Que poco necesita una persona, por momentos, para ser feliz, me corrijo –para “sentirse” feliz- porque si digo “para ser feliz” estoy englobando mucho –tiempo/ persona/ espacio/ estabilidad- en cambio el sentirse feliz describe momentos de pura felicidad, de cariño, de placer, de cuerpo y alma. Momentos, por cierto, fugaces que muchas veces nos conmueven más que una eternidad vivida, para nada. De eso se trata la magia de lo efímero, de lo que corre, vuela, despunta, fluye… También de eso se trata la vida misma –aunque a veces no lo queramos aceptar- se trata de vivir y no de revivir, de disfrutar de lo simple, de hacer y de sentir, no de evocar sensaciones pasadas o esperar milagros de un presente que promete, pero no cumple. Se trata –inevitablemente- del ya, de lo pronto, de lo justo. A lo que nosotros mismos nos enfrentamos, el desafío de lo nuevo, de lo exótico, de lo turbio. Es así, el desafío, la prueba, el interrogante del mañana, el no saber que va a pasar, qué o cuánto nos deparará el futuro –tan incierto e impredecible como nosotros- El sentirse, en ocasiones, deliberadamente importante, alta, diosa, casi imprescindible. Brutal, espléndida, aunque sea sólo por un instante. Un instante destinado para cada uno de nosotros. Sentir que la vida nos pertenece, nos conmueve y nos incita. Sentir que cada uno de nosotros puede moldear la vida su gusto –sentir que estamos vivos- sentir que sentimos” Sigue Leyendo...

un puñado de sangre que se escurre…

Cuando de corazones se trata -nosotros, los de entonces, los que quedamos- sentimos como esa fibra sedienta y desobediente que es nuestro más intimo órgano, rey de cuerpos, rey de memorias y de totalidades late con más y más fuerza, con empuje con empeño, a veces, y con zozobra, con lástima, otras…

ayy corazón mío! …que has hecho de mí, corazón mio, que has hecho con él, sin él, conmigo, otra vez… espectante de un futuro que promete, pero no cumple, de un mañana que viene pero no llega.

Corazones del mundo, desde mi mas honda puerilidad -como siempre- inocencia pacífica y armoniosa, corazones del mundo crezcan, inspírense…hablen -sin palabras, con miradas, escurriéndose…- háganlo por mí, por favor. Sigue Leyendo...

Por dos

“Él tiene eso del fuego, de los suspiros, del calor que quema, que calcina. Puede ser todo y tenerlo todo, puede darte todo. Tiene un pasado incierto, que en realidad tampoco importa demasiado. Él es el presente, el momento y nada más. Pero eso lo puede todo. Tan sólo ese momento va más allá de los límites del tiempo, corrompe días, corrompe horas y años, lo da vuelta todo, eso es lo que vale. Irrumpe, enloquece, desenfrena. Te lleva atónita con él.
Logra que desvanezcas en suspiros, con palabras, con sonidos, con arena, con todo. También promete, pero eso no es necesario y tampoco importa demasiado. Es la magia de lo momentáneo. La intensidad de lo fugaz. Y viviendo me doy cuenta que es así, y pensando me doy cuenta que no puedo pensarlo, sólo tengo que vivirlo. Y viviendo -me atrevo a decir- conozco y descubro, también sueño y amo por momentos, y me cercioro que solo puedo amar en los sueños, porque en los momentos que amamos, nos parece, somos dueños de nuestra propia fantasía. Sólo se necesita eso. Así lo descubrí, así lo descubrimos y nos reímos y nos quisimos y nos besamos y lo guardamos para siempre. Sigue Leyendo...

Llegué…

Llegué. entré. todo estaba inundado por una blanca oscuridad. Esa puerta blindada de la que tanto había escuchado permanecía abierta para mi. se sentía una monótona gotera por algún lugar. estaba inmensamente inundado por un caótico vaho frío, muy frío que viajaba por el aire como flechas quemantes interrumpiendo al tiempo. las ventanas permanecían cerradas, mudas, culpables como ocultando un terrible secreto. todo se hallaba en soledad…mis huellas quedaban marcadas con cada pisada de mi cuerpo exhausto, infortunado, sin abrigo. era todo claramente oscuro, lleno de una luz interior que flotaba solo en mi. seguí caminando y sentí un profundo aroma a muerte, que en estos tiempos abundaban por alli. Sigue Leyendo...

Colisión

Caminaron largo rato moderando los pasos, y las conciencias. Se mantenían ajenos, pero expectantes. Cada uno representaba un mundo fortuito de aspiraciones y esperanzas. Era época de cambios, de ruptura. Querían hablarse pero no encontraban el camino para convergir, o no encontraron el idioma. Mascullaron sílabas. Perdieron risas, perdieron caras y ayudaron a despuntar motivaciones. Los pasos parsimoniosos, tan lentos y opacos parecían retroceder en vez de avanzar. La serenidad del amanecer se confundía entre las sendas. El cielo rosado resucitó memorias que antes, embaucaron corazones, destiñeron ilusiones. Tan sólo la quimera de los sentidos dejó fluir dientes con sonrisas, manos que prometían caricias, ingenua. Recuerdos. Versos y frases que en algún pasado remoto significaron mas que eso. Pero ya había cambiado, por momentos, así lo sentía. Cuando por fin llegaron al límite se preguntaron si era verdad. Lo era. Las finuras del placer pasan por la mente… Sigue Leyendo...

Diesel

¡cuan querido eres amigo mío!
estas paginas estan colmadas de tu riqueza literaria…
y no menos de tu astucia y simpleza personal…

brindemos hoy por tí,
ya que dia a dia nos quejamos de que no hay nada por que brindar…
brindemos por las ganas de escribir, de crecer
de sentir, de expresar…
que nos transmites día a día
como un impulso fluorescente que nos impulsa gratamente!!

gracias, por dejar crecer en tí
a una persona como tú… Sigue Leyendo...

Lo efímero

Como dijo un compatriota, “la vida es bella y efímera, como los altares de flores y los amores de paso”…
y Galeano tenía razón,
claro que sí,
será porque todo lo efímero nos resulta mas bello y emocionante,
será porque la belleza es efímera, o al menos que sea una obra de la propia madre naturaleza, destinada a perdurar…
pasamos por el mundo como pequeñas ráfagas suicidas que no terminan de aparecer cuando ya perecen…

carpe diem

Se trata del carpe diem…
de la magia de lo efimero, lo que fluye…despunta
revuelca, desmigaja
estamos vivos, si!! esa es la esencia
hoy tengo muchas vidas, algunas ,muertes
muchas dudas, pocas certezas, solo una o dos.
hoy me tengo a mi y a ese motor que late y me hace viajar y encontrarme por ahí, sintiendo, traspasando las parcelas del cuerpo.
hoy es solo una reflexion,
mañana,
una verdad-