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Relatos

perdonad la ortografia

reten el aliento solo un segundo y cierra los ojos.
aora siente, siente lo todo , el tacto de las yemas de tus dedos contra de la mesa,
las suelas de tus zapatos en el suelo,siente como corre tus ojos buskando la luz cn los parpados serrados ,comoose yena tu pexo de aire al respirar ,sientete x dentro y toda tu piel
. siente como al leer esto me sientes serca. despreocupate de todo …
escuxa tu corazon yorando pidiendouna salida,
sonrrie aunke yebes tu pena dentro .

Con tu índice izquierdo me señalas la luna…

Con tu índice izquierdo me señalas la luna mientras que con el derecho me tocas el corazón… y así, de esta manera tan humana, pones en comunicación el lazo que une mi sueño con mi vida. Y tú, amada mía, conviertes la luna en el sueño efectivo de todas mis noches y conviertes a mi corazón en la vida continua de todos mis días.Gracias a tu índice izquierdo y a tu índice derecho que son la expresión de mi existencia.

Los Mamertos

Estaba en un mercado del Centro comprando unos dulces que me fueron “amablemente” encargados durante una llamada telefónica. Fue una de esas peticiones que prometen mucho dolor y sufrimiento de no ser cumplidas.

No encontré tales dulces en ninguno de los locales, así que siguiendo las recomendaciones de un policía, fui a una tienda que los vende afuera del mercado. Ahí si tenían, así que los compre y de paso me queje bastante por el precio. Pero como donde manda capitán no gobierna marinero, a pagar.

Justo en ese momento, se escucharon unos gritos y vi que mucha gente corría hacia mi. Me hice a un lado para evitar que me planchara la marabunta esa, y entonces escuche sonidos de disparos. Sigue Leyendo...

EL POZO NEGRO 3 PARTE

El viejo Leonidas, observaba con atención a sus pequeños oyentes, mientras inspiraba con pasión enormes caladas de su pipa, para luego formar perfectos aros, que se atravesaban, unos con otros. Para alborozo y aplausos de todos los chiquillos, que impacientes esperaban que Leonidas les contara la continuación de su terrible historia.
Temblaban tan solo al imaginar a Matilde y toda la crueldad y temor que padeció, una niña tan risueña
-Vamos Leonidas cuéntanos que le paso a Matilde, gritaron algunos niños.
Todos habían oído hablar de ella pero ninguno la había visto.
Ni tan siquiera sus amigos más allegados Adrián, Alberto y sus hermanos pequeños Sigue Leyendo...

Allí donde tu sueño se junta con el mío

Allí donde tu sueño se junta con el mío djamos de ser dos islas separadas para unirnos en un solo paisaje sin fronteras… y es cuando tu cuepo y tu alma y tu aliento de eternidad terrestre funden su energía con mi presencia real y nos convertimos en fuente para nuestros comunes destinos. Allí donde tu sueño se junta con el mío es donde la vida se convierte verdaderamente en un sentido digno de ser exprimentado.

Una noche muy especial.

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El padre miraba a través de los cristales como las gentes del vecindario iban y venían sin parar. Unos y otros se dirigían a distintos lugares a celebrar la noche de fin de año.
Había un pequeño grupo que iba a iniciar la fiesta en los bajos del edificio colindante, la música se escuchaba en toda la calle. El ambiente era una gran fiesta, el viejo año tocaba a su fin y ellos estaban cada día peor.

Caminamos…

Caminas a mi lado, sin importar el ayer, las personas ni los problemas venideros, caminas junto a mi. Y por eso te he de amar por siempre, y por eso, te he de adorar porque tu solo te ocupas de caminar conmigo.

Estas ahi, donde no te veo, solo estas ahi. Ibas junto a mi todo este tiempo y nunca te vi. Hasta que un dia, la vida quizo premiarme contigo. Pero, ¿Que fue lo que hice para merecerte?.. Sigo sin comprenderlo. Tu solo me besas y me dices que soy lo que has esperado, lo que mas has amado, lo que nunca olvidaras… Yo solo me quedo callada, sin saber que reponder, sin saber que hacer. Con muchas ganas de sollozar de alegria porque al fin llegaste a mi. Sigue Leyendo...

Una estrella de mar es mi vida

Una estrella de mar es mi vida con sus brazos entregados a la mansa tarea de abrir brechas con un puñado de amorosas palabras en este desdoblar sensaciones en el vértigo de mi propio destino. La carne de escritura se hace viva cuando abro los ojos y veo una mañana más para la razón de sentir este horizonte que transformo, cerrando los ojos un instante, en jergón de luz y de sombras por donde habitan mis sílabas…

Momo y yo

Te miran, me miran y no nos creen. De la misma sangre pero tan distintas. Estilos opuestos, caracter distinto y formas de ver la vida tan distintos.

Asi somos tu y yo. El tiempo es diferente en ambas, incluso la forma en que nos demostramos afecto. Peleamos, si, discutimos tambien, incluso dejamos de hablarnos. Sin embargo, convivimos a diario, sabes como lloro, sabes como rio, sabes que me agrada y que no me gusta. Se que te molesta, que te hiere, que te hace reir a carcajadas.

Caer…

Me lanzo al vacio, sin esperar tus brazos que me sostengan, sin esperar caer en algo suave que haga menos mi caida de tan alto. Solo me lanzo, no temo, no espero, no pienso, solo me dejo guiar por el aire que pega en mi rostro y la sensacion de caer, como de volar… solo eso, solo caer. Lo demas, no lo se…

Tres palabras

Porque solo fueron tres palabras, en la gélida noche mi fonemas diluian la poluta atmósfera. Porque solo queria decir “te amo tanto”, “muero por ti”, cosas parecidas que te hicieran comprender lo infinito de mi sentir por vos. Pero no me dejaste hablar, me diste la espalda mientras yo murmuraba. De pronto, mi ser gritó. Vete al diablo. Tres palabras, al fin y al cabo.

En Las Ramblas de Barcelona

Había quedado con mi suerte en el Zurich, pero ésta no se presentó, así que me acerqué a ver la actuación de soledad y no encontré localidades. Aquí el silencio fragmentó sus notas y se alejó en dirección opuesta
Bebí en la fuente de Canaletas, frente al eterno bar Nuria, donde un transistor dejaba oír “victima del silencio” del grupo Burning – qué casualidad más fatídica pensé.
Bajé zigzagueando por las ramblas como animal acorralado, huyendo de la manada aglutinada. Las estatuas grotescas y humanas, me saludaban sonrientes.
Nativos y turistas festejaban alborotados, algún triunfo deportivo.
Cual torre de babel, ¿Cuántas lenguas taconeaban mis sienes? La jauría aullaba acribillando el pánico, convertido en masa verbal. Sigue Leyendo...

Su amigo

En esa foto estamos los tres: mi más íntima amiga de la infancia y la adolescencia, él (Pedro) y yo. Estamos en una pista de esquí de la Sierra de Guadarrama; él es el único que tiene puestos los esquíes, nosotras dos estamos simplemente de pie sobre la nieve, con nuestras botas de esquiar, pantalones y jersey grueso, que prácticamente sobraba porque el sol apretaba de firme allá arriba. Sin embargo, se habían helado las cañerías del agua por el frío tremendo que acababa de hacer y no habíamos podido llenar las cantimploras, así que de tanto en tanto teníamos que coger un poco de nieve no hollada y deshacerla en la boca si no queríamos pasar sed. Sigue Leyendo...

Dolor

Cuando recuerdo el empuje y la actividad que tenía cuando era joven, cómo manejaba todos los asuntos que de ella dependían, no puedo soportar los llantos que a veces se le escapan en nuestras charlas telefónicas. Pero ella enseguida se recompone, se enjuga las lágrimas y sigue hablando, porque la conversación siempre le ha gustado mucho. En esos momentos le digo, aunque no puedo verla, que no se seque las lágrimas frotándose los ojos con el pañuelo, sino que lo aplique suavemente porque, si no, se le irritan mucho los ojos. Lo he observado cuando la he visto llorar. Ella dice que me hace caso. Sigue Leyendo...

La que nunca se irá

miraba a un lado y se encontraba con ella, la que se le parecía tanto
una silueta la queria acompañar, se le aparecía de frente, a la izquierda, a la derecha, atrás… ella se asustaba demasiado, no le gustaba que apareciera y despareciera y mucho menos que la acompañara… caminaba y no la dejaba sola, aparecía en el rato menos pensado.
cuando menos lo esperaba, se sentía perseguida… regresaba a ver y ahí estaba siguiéndola, ella asustada seguía su norte y se tranquilizaba porque sabía que no le haría nada, luego de seguir caminando aparecía de frente, luego de lado, luego eran dos, luego tres y así se multiplicaban… ella no entendía porque, porque ella estaba allí y luego eran demasiadas siguiendola, acompañándola…
ella llegó a su casa, perseguida o acompañada?? Sigue Leyendo...

Desde la mesa

Bajo hasta el mar desde la mesa donde apoyo la cuartilla donde escribo versos y me quedo quieto con la memoria de todo mi cuerpo sumergida en el malecón costero y prolongo mis voces, con emociones sin tiempo ni espacio, para sentirme una vez más apretado al instinto del latido de las olas batiendo la fina arena blanca de la playa.

Sé que sólo es una traslación de la frontera imaginativa desde mi querida cuartilla llena de versos hacia ese pequeño mar… pero me basta una palabra pensada y escrita entre las estrofas para ser la íntima iluminación del beso de las aguas como una verdad sincera: el destino acuoso de mi vida. Sigue Leyendo...

Los colores del amor

Puede ser rojo, azul, negro… puede ser de todos los colores imaginables como dice muy bien la pintora murciana Paula Real en una entrevista publicada en el diario La Verdad. Y es cierto. Buscamos siempre información sobre los colores con qué pintar el amor y vemos poesía claroscura en todos sus sentires. A veces elegimos el color apropiado a cada estado de ánimo y como estos son tan plurales en los seres humanos, la gama de colores con los que podemos pintar el amor y el desamor es infinita.

¿Amores optimistas o trágicos?. De todo hay en esta vida. A pesar de todo lo escrito sobre el tema, el amor es un cuadro siempre pintado con una multiplicidad infinitamente variable de colores, como así lo demuestra las diferencias que existen entre unos seres humanos y otros y los estados de ánimo en que se encuentren a la hora de pintarlo. Sigue Leyendo...

SECUESTRO.

Mi vida transcurría normal entre el circo de la vida diaria. Trabajo, escuela, familia, y amigos, girando y girando en una rutina que a todos nos atrapa, pero que habremos de añorar cuando un ser extraño te arranca impasible de ella, te arrebata lo que conoces y te introduce en un hoyo negro.
Caminaba tranquila pensando en cosas que hoy parecen tan lejanas, tan inverosímiles. Mi cabeza que flotaba en las nubes impidió que mis ojos estuviesen atentos del peligro que circundaba. Y aunque lo hubiesen estado, mi fragilidad ante esos monstruos me hubiese hecho perder la batalla por la libertad. Sigue Leyendo...

el arte del amor

en las relaciónes que mantenemos aprendimos el misterio de amar y curar nuestras heridas para poder experimentar la alegria de vivir cotidianamente, pero lo más importante de todo es que aprendimos a abrir nuestro corazón incondicionalmente a otra persona.

La colina de las margaritas

El cielo está dimanando en esta tarde azul una inmensa luz dobre la colina donde las magaritas rondan el perfume de las clavelinas y un grupo de corderitos retozan en el valle. De la mano de las flores se columpian las espigas onduladas y yo te llamo, Esperanza, como un nombre sin olvido, como una danza nada más, como un trenzar de viento besando la ronda infinita del sol en la colina.

En toda la extensión del bosque se rezuman las mariposas que vuelan buscando el canto del valle blanqueado y las viñas y el pinar y el cerro entero de las azucenas llenan de color el manso atardecer que cae lentamente como bailando en el fervor de este pequeño mundo recogido en el resplandor de los aromos gajos aromados por el azafrán volador. Sigue Leyendo...

Ruptura

No estoy para crucigramas, ni acertijos, devélate, háblame, directo y a quemarropa, dímelo a los ojos con fuerza, igual como antes decías que me amabas. Ódiame si así tiene que ser, pero dímelo, que adivino no soy y para incertidumbres mejor me hago científico. Mi paciencia tiene fronteras y a este punto me siento refugiado en otra tierra, ya se me acabó contigo. Habla, que callar no es una opción, enfréntame, mírame, suéltalo. Que en tu lengua la verdad nada hace y de más sirve en mi lado.
¿No te cansas de esto acaso? Dejemos las indirectas y por una vez juguemos mi juego, que la alcahuetería ya no la tengo en mi alacena.
Porque quien vientos siembra, recoge tempestades. Sigue Leyendo...

EL POZO NEGRO 2PARTE

Niños escuchad con atención pues voy a contaros algo sobre la familia de Eulalia y como ocurrieron los hechos.
Los cativos sentados en el suelo, calladitos esperaban inquietos las palabras del viejo.

La historia de la pobre Eulalia era todo un misterio, según cuentan los mas allegados a la triste familia Tourillo.

Todo comenzó una tarde de primavera, cuando Eulalia acababa de cumplir los 7 años.

Eulalia era una niña regordeta pero con una cara muy agraciada, tenia dos simpaticos hoyuelos a cada lado de sus carnosos labios, le encantaba reír, y aveces sin motivo, con solo su pensamiento, estallaba en carcajadas, su risa era tan pegadiza que hasta los adultos se destornillaban de risa cuando la oían. Sigue Leyendo...

La vida en canción

Le gusta escuchar esa música diferente, de esa que poca gente sabe apreciar, con letra romántica, que siempre hable del amor. No dibujado con corazones, ni con besos melosos, sino con esa letra que hable escondido en paisajes, fechas, que cuando describan un beso no lo hagan de la manera típica, sino con la complejidad que un beso implica o el significado profundo de la unión de dos cuerpos, que no solo es físico sino… profundo.
Se queda horas imaginando, que esa historia cantada con una voz tan sentida, es la de ellos…
Mira al mar, mira el sol, mira la luna… Sigue Leyendo...

EL POZO NEGRO 1PARTE

Aquel pozo, atraía a los niños, como si de caramelos o bombones se tratara y no seria por la de advertencias que se comentaban por el pueblo.
Todas las noches el viejo Leonidas, hacia una gran hoguera, a la salida del pueblo y en el filo del viejo puente romano allí sentado sobre dos piedras, ya prendida la hoguera, encendía con parsimonia su pipa observando mientras llegaban los niños.
Se congregó un gran número de chiquillos, ansiosos por oír sus espeluznantes relatos, algunos decían que el viejo ya había pasado la centena y que sus achaques eran fruto de enfrentarse a la terrible bestia que habitaba desde tiempo inmemorial en pozo de los escalofrios. Sigue Leyendo...

Nueva Génesis de la Humanidad

Saldrá el silencio con su polvo de roca destruida y caerán los años en forma de vidrios rotos y entonces flotará en el aire un corazón rodeado de vidas, de música escuchada en el patio cercano y en la habitación vacía pero con ventana abierta para escuchar lo que permanecerá oculto en las voces interiores de los hombres.

Y pasarán oliendo a jabón nuevo los rostros de las hembras buscando al mar y el mar, a muy corta distancia, las sonreriá y las acogerá en sus olas y las besará con boca soleada y veraniega mientras los hombres… !otra vez los hombres!… seguirán luchando por alcanzar los altos puestos de las jerarquías en las rifas del poder. Sigue Leyendo...

oraciones ardientes que se pegan en un reflejo inconcluso

Al crepúsculo de una oscuridad absoluta envuelta de un aroma a alcohol destilado.
El encuentro desnudo de un cansancio perverso.
Carcome mi alma el olor a formol.
Luces destellantes alumbran mi cara.
Sonidos sordos escruten mi alma.
Lacias lágrimas brotan de una facción descubierta al olvido.
Palabras necias que afrontan mis penas.
Mueren minutos ante la espera fortuita.
Descansan muertos ante un sueño que nunca profesan.

Operación Bernhard

Operación Bernhard, la falsificación.

En 1.939 en plena Segunda Guerra Mundial el Servicio Secreto Alemán (SS) inicia la Operación Andreas, que más tarde y por motivos de seguridad pasó a llamarse la Operación Bernhard, consistente en la fabricación y posterior puesta en circulación de una muy importante cantidad de papel moneda británico falsificado con el único fin socavar las bases de la economía británica.

!Vámonos de copas, Only!

– Hola Only… ¿nos vamos de copas esta noche?.
– Por supuesto que sí, diesel… ¿hacia dónde quieres ir?.
– !Vamonos de copas, Only, al Jardín d ela Bohemia!.

Y tú y yo caminamos bajo la lur el sendero luminoso de los pequeños parques de este frío otoño somnoliento, para hablar junto a dos copas de ron de cosas del alma humana.

Entramos en el bar. Nos sentamos juntos a la ventana y ambos miramos hacia las estrellas…

Y te seguiré llamando Ternura…

Y mientrtas esté vivo te seguiré llamando Ternura… Y mientras me quede un hálito de existencia te seguiré llamando Ternura… Y cuando me llegue la muerte te seguiré llamando Ternura… Y más allá de la muerte te seguiré llamando Ternura… Y durante toda la eternidad te seguiré llamando Ternura… Y más allá de la eternidad te seguiré llamando Ternura… Y en la nada más abosluta te seguiré llamando Ternura… Y en el todo más infinito te seguiré llamando Ternura… Y cuando mi cuerpo se deshaga en billones de átomos minúsculos te seguiré llamando Ternura con cada uno de esos minúsculos átomos… Y cuando ya los déspotas de este mundo hayan prohibido por ley cualquier manifestación de amor te seguiré llamando Ternura… y cuando el amor no exista porque lo habrán aniquilado te seguiré llamando Ternura… Y con la plena libertad de expresión que me da el derecho de haber nacido te juro que no deseo cambiar aunque todos, absolutamente todos, hayan cambiado… para seguir llamándote Siempre Siempre Siempre… Ternura Ternura y Ternura. Sigue Leyendo...